1/02/2022, 00:28
— No te disculpes. Nos has ayudado mucho, Kyoka-san.Ahora te ayudaremos nosotras. No te preocupes. Los traeremos de vueltas. ¿Sabes dónde vive Masu-kun? Probablemente haya vuelto a casa.
Kyoka alzó una ceja, extrañada de las palabra de la kunoichi.
— No, nosotros vivimos los cuatro aquí. Por la noche sacamos unos futones y dormimos en mi sala. No es que nademos en dinero precisamente, empezar un negocio... Bueno, que hubiese vuelto aquí. ¿Vais a ir vosotras al hospital? Entonces yo esperaré aquí por si vuelve.
Le preocupaba que la casa se quedase sola, no solo por el agujero que había en la última sala, sino por si volvía cualquiera de sus tres compañeros desaparecidos. No entendía nada de lo que estaba pasando y quería cubrir tantas opciones como fuera posible.
Kyoka alzó una ceja, extrañada de las palabra de la kunoichi.
— No, nosotros vivimos los cuatro aquí. Por la noche sacamos unos futones y dormimos en mi sala. No es que nademos en dinero precisamente, empezar un negocio... Bueno, que hubiese vuelto aquí. ¿Vais a ir vosotras al hospital? Entonces yo esperaré aquí por si vuelve.
Le preocupaba que la casa se quedase sola, no solo por el agujero que había en la última sala, sino por si volvía cualquiera de sus tres compañeros desaparecidos. No entendía nada de lo que estaba pasando y quería cubrir tantas opciones como fuera posible.