2/02/2022, 03:20
(Última modificación: 2/02/2022, 07:38 por Akamatsu Nao. Editado 1 vez en total.)
La chica reaccionó impresionada, aunque para Nao, aquello no era demasiado grandioso.
—Realmente, no estoy haciendo más que buscar un poco más rápido — suspiró. —Mis amiguitos puede otear el lugar, e incluso en rincones muy pequeños donde a nosotros nos costaría revisar. No creo que pesen siquiera lo suficiente como para causar un derrumbe, así que estaremos más seguros así —: Giró hasta una pared, pero luego volvió su vista a Jun y alzó el dedo. —Y sí, pude haberlo hecho desde antes y ahorrarnos tooooodo el paseo por la casa, pero realmente como estaba la situación, no tenía ganas de gastarme una técnica en eso — Se excusó al ver venir una posible reprimenda.
Tenía que aprovechar los golpes de suerte. «Además, no hubiéramos descubierto el crujido en el piso.» Ni él mismo estaba seguro de qué esperar, pero otras dudas rondaban su cabeza.
Ahora no les quedaba más que teorizar. Aquella misión era una tapadera para algo más grande, una investigación sobre un crimen, nada menos. «Dos personas que intentan buscar justicia por su propia cuenta.» No era algo para tomar a la ligera.
—El jōnin que usted dijo ver, por como lo cuenta no parecía un tipo que estuviera en sus cabales — Ahora sí se dirigió a la pared menos húmeda que encontró para recostarse en ella. —¿Qué conexión tiene con la clienta de la misión?
—Realmente, no estoy haciendo más que buscar un poco más rápido — suspiró. —Mis amiguitos puede otear el lugar, e incluso en rincones muy pequeños donde a nosotros nos costaría revisar. No creo que pesen siquiera lo suficiente como para causar un derrumbe, así que estaremos más seguros así —: Giró hasta una pared, pero luego volvió su vista a Jun y alzó el dedo. —Y sí, pude haberlo hecho desde antes y ahorrarnos tooooodo el paseo por la casa, pero realmente como estaba la situación, no tenía ganas de gastarme una técnica en eso — Se excusó al ver venir una posible reprimenda.
Tenía que aprovechar los golpes de suerte. «Además, no hubiéramos descubierto el crujido en el piso.» Ni él mismo estaba seguro de qué esperar, pero otras dudas rondaban su cabeza.
Ahora no les quedaba más que teorizar. Aquella misión era una tapadera para algo más grande, una investigación sobre un crimen, nada menos. «Dos personas que intentan buscar justicia por su propia cuenta.» No era algo para tomar a la ligera.
—El jōnin que usted dijo ver, por como lo cuenta no parecía un tipo que estuviera en sus cabales — Ahora sí se dirigió a la pared menos húmeda que encontró para recostarse en ella. —¿Qué conexión tiene con la clienta de la misión?