11/02/2022, 20:45
Su tono sonaba apenado y triste, y las palabras que lo acompañaban solo lo ennegrecían aún más hasta el punto de captar bastante la atención de la kunoichi. Dejó de mantener el equilibrio, dejando que la silla reposara sobre sus cuatro patas mientras cruzada de brazos, lo miraba con cierta atención. Se acarició la nuca posteriormente, con uno de sus brazos, torciendo un poco la cabeza. Sea lo que sea lo que le ocurria, realmente parecía muy grave; pero finalmente el mismo pareció darse cuenta de que estaba divagando en exceso.
— Yo soy Lyndis. Lyndis Zhaoren, genin de Kusagakure — dijo levantando una de sus palmas. — Sea lo que sea lo que te atormenta, parece realmente grave. No me importaría escucharte, pero suena a algo que no quieres contarle a la primera desconocida que pasa. Jajaja
Volvió a acariciarse la nuca, mientras mostraba una sonrisa tonta de afilados dientes.
— Yo soy Lyndis. Lyndis Zhaoren, genin de Kusagakure — dijo levantando una de sus palmas. — Sea lo que sea lo que te atormenta, parece realmente grave. No me importaría escucharte, pero suena a algo que no quieres contarle a la primera desconocida que pasa. Jajaja
Volvió a acariciarse la nuca, mientras mostraba una sonrisa tonta de afilados dientes.
¡Gracias a Ranko por el avatar!