13/03/2022, 09:10
El uzujin no parecía estar muy a gusto con la calidez que intentaba brindarle el hombre. De hecho, rechazó la oferta que este le había ofrecido, yendo a buscar un paraguas que le llamo mucho más la atención. No era solo el aspecto y la solidez, sino que argumentaba que estaba mucho más barato que el artilugio amarillo que sostenía el hombre.
Metió el paraguas amarillo en el forro y lo dejó apoyado cerca.
—Entre muchas otras cosas. Si. — Afirmó ser el dueño, bastante seguro de lo que decía.
El vendedor no se molestó en mostrarle una amplia sonrisa al muchacho. Se acercó al chico y vio el paraguas de cerca. Está vez no hubo contacto físico, ni siquiera quiso tocar la mercancía que estaba vendiendo.
—Bien, si puedes cargarlo y tienes el dinero, es tuyo — La sonrisa del hombre desbordaba amabilidad. Quizá demasiada. — ¿Seguro que deseas comprar este paraguas? Debo saber que estés seguro porque no hay devoluciones.
Si a él le gustaba y sentía que era mejor, ¿qué podía hacer el mercader? Después de todo, el cliente siempre tiene la razón ¿No?
Metió el paraguas amarillo en el forro y lo dejó apoyado cerca.
—Entre muchas otras cosas. Si. — Afirmó ser el dueño, bastante seguro de lo que decía.
El vendedor no se molestó en mostrarle una amplia sonrisa al muchacho. Se acercó al chico y vio el paraguas de cerca. Está vez no hubo contacto físico, ni siquiera quiso tocar la mercancía que estaba vendiendo.
—Bien, si puedes cargarlo y tienes el dinero, es tuyo — La sonrisa del hombre desbordaba amabilidad. Quizá demasiada. — ¿Seguro que deseas comprar este paraguas? Debo saber que estés seguro porque no hay devoluciones.
Si a él le gustaba y sentía que era mejor, ¿qué podía hacer el mercader? Después de todo, el cliente siempre tiene la razón ¿No?