3/04/2022, 00:10
El hombre llevó ambas manos a su pecho mientras se inclinaba hacia atrás, a la defensiva.
— E-esto... lo siento, pero entenderás que no puedo. —Le dijo, aunque Chika probablemente no lo entiendiese—. Y tampoco podré acompañarlos.
Raijin, por su parte, no intervino en ningún momento, dejándoles hablar.
— E-esto... lo siento, pero entenderás que no puedo. —Le dijo, aunque Chika probablemente no lo entiendiese—. Y tampoco podré acompañarlos.
Raijin, por su parte, no intervino en ningún momento, dejándoles hablar.