28/04/2022, 19:33
Aunque el hombre les echó una mirada inquisitiva no las detuvo ni les dijo nada más. Las dejó escabullirse hacia un lado. Si decidían entrar por la fuerza ya tomaría medidas, pero no tenía ninguna necesidad de abandonar su puesto para perseguir a dos kunoichis.
Se quedó donde estaba, aunque algo más atento de lo normal al lateral por el que estaban ellas.
Se quedó donde estaba, aunque algo más atento de lo normal al lateral por el que estaban ellas.