5/05/2022, 22:08
— ¡Claro, pase! Ahora te guío. Aunque probablemente siga dormida ahora mismo.
— ¡S-Sí! — contestó ilusionada, iluminandosele la cara conforma entraba en la casa.
Se pegó la carta al pecho y paso en cuanto Toshio se apartó, echando un vistazo a la casa sin demasiado disimulo. Esperaba encontrar alguna pista de camino hacia Kinumi, pero obviamente, no lo encontró.
— Gracias, Kurogane-san. El señor me dijo que no me acercase, que podría ser peligroso. No, no sé qué está pasando. Nos ha dado días libres a todo el servicio. — comentó preocupada la mujer mientras le seguía hasta la habitación.
Cuando Toshio entró saludando alegremente sin siquiera llamar a la puerta, la rubia alzó la mano en un intento de detenerlo.
— No hace falta... — pero ya era tarde. — ¿Señorita?
Se asomó solo para encontrarse a Kinumi dormida de nuevo y sin gesto alguno de haber notado su presencia.
— Dejela dormir, solo quería ver que estaba bien.
Se quedó unos segundos allí parada, en el marco de la puerta, observando a la chica en la cama con cariño.
— ¡S-Sí! — contestó ilusionada, iluminandosele la cara conforma entraba en la casa.
Se pegó la carta al pecho y paso en cuanto Toshio se apartó, echando un vistazo a la casa sin demasiado disimulo. Esperaba encontrar alguna pista de camino hacia Kinumi, pero obviamente, no lo encontró.
— Gracias, Kurogane-san. El señor me dijo que no me acercase, que podría ser peligroso. No, no sé qué está pasando. Nos ha dado días libres a todo el servicio. — comentó preocupada la mujer mientras le seguía hasta la habitación.
Cuando Toshio entró saludando alegremente sin siquiera llamar a la puerta, la rubia alzó la mano en un intento de detenerlo.
— No hace falta... — pero ya era tarde. — ¿Señorita?
Se asomó solo para encontrarse a Kinumi dormida de nuevo y sin gesto alguno de haber notado su presencia.
— Dejela dormir, solo quería ver que estaba bien.
Se quedó unos segundos allí parada, en el marco de la puerta, observando a la chica en la cama con cariño.