20/05/2022, 22:50
Coincidiendo en opinión, o mejor dicho en reacción, el dúo de genins casi echan de su estómago el desayuno. Por suerte, ninguno llegó a tanto, simplemente tuvieron el impulso casi irrevocable de hacerlo. La chica dijo que ojalá hubiese ahorrado lo suficiente para comprar un respirador, la verdad es que uno de esos en éste tipo de situaciones podía ser realmente genial. Pero ahora mismo, de lo que disponían era lo que tenían encima, y lo que había en el cuarto de limpieza.
Los chicos regresaron tras ver la tarea que tenían por delante hasta el cuarto de limpieza, donde la kunoichi fue la primera en armarse con una buena protección. Lo primero que hizo fue quitarse la capa y los guantes, y tras ello tomó un delantal, guantes, un cubo con agua limpia, un trapeador y varios paños. El chico sin embargo, no tomó nada, se desplazó hacia un lateral y se quitó su "mochila", dejándola a su vera en el suelo.
—Creo que deberíamos ponernos una mascarilla, al menos tapará un poco el olor ese tan desagradable. —Comentó, en lo que su atención se fijaba en su bolsa de vendas.
El chico comenzó a destapar poco a poco, venda a venda, lo que había estado portando hasta el momento. Para cuando terminase, podría verse que ese bulto con pelos y vendas era un títere con forma humanoide. Hecho principalmente de madera, pero con algunos rasgos de persona como los ojos, y los labios, el títere se mantuvo en el suelo inerte.
—Espero que no te moleste si lo hago mientras practico mis habilidades.
El chico tomó una de las mascarillas y se las puso, tras ello tomó un par de trapos y un spray de limpieza general, así como un bote de desinfectante. Casi todo, salvo el bote de desinfectante, lo puso al lado de la marioneta, y tras ello sacudió su mano hacia la misma, lanzando unos hilos de chakra casi imperceptibles. El títere casi pareció dar un salto, como si algo le hubiese llevado a la vida repentinamente. El títere levitó rápidamente, recogiendo los trapos y el spray de limpieza. Con un gesto de mano por parte del chico, la marioneta caminó a su vera, en lo que se dirigían hacia las últimas salas.
—¿Comenzamos con la de la izquierda? —Que era la sala enfrentada a la que tenía el balde de sangre.
Los chicos regresaron tras ver la tarea que tenían por delante hasta el cuarto de limpieza, donde la kunoichi fue la primera en armarse con una buena protección. Lo primero que hizo fue quitarse la capa y los guantes, y tras ello tomó un delantal, guantes, un cubo con agua limpia, un trapeador y varios paños. El chico sin embargo, no tomó nada, se desplazó hacia un lateral y se quitó su "mochila", dejándola a su vera en el suelo.
—Creo que deberíamos ponernos una mascarilla, al menos tapará un poco el olor ese tan desagradable. —Comentó, en lo que su atención se fijaba en su bolsa de vendas.
El chico comenzó a destapar poco a poco, venda a venda, lo que había estado portando hasta el momento. Para cuando terminase, podría verse que ese bulto con pelos y vendas era un títere con forma humanoide. Hecho principalmente de madera, pero con algunos rasgos de persona como los ojos, y los labios, el títere se mantuvo en el suelo inerte.
—Espero que no te moleste si lo hago mientras practico mis habilidades.
El chico tomó una de las mascarillas y se las puso, tras ello tomó un par de trapos y un spray de limpieza general, así como un bote de desinfectante. Casi todo, salvo el bote de desinfectante, lo puso al lado de la marioneta, y tras ello sacudió su mano hacia la misma, lanzando unos hilos de chakra casi imperceptibles. El títere casi pareció dar un salto, como si algo le hubiese llevado a la vida repentinamente. El títere levitó rápidamente, recogiendo los trapos y el spray de limpieza. Con un gesto de mano por parte del chico, la marioneta caminó a su vera, en lo que se dirigían hacia las últimas salas.
—¿Comenzamos con la de la izquierda? —Que era la sala enfrentada a la que tenía el balde de sangre.