20/06/2022, 01:02
Toshio sonrió. ¡Claro que estaba todo más que listo! Se esforzó al máximo en ser lo más creíble posible, a pesar de que actuar no era lo suyo. Solo había un pequeño problema con todo aquello...
— Oye, oye, oye ¿cómo que "seguidme"? ¿No vamos a esperar a Hana?
Pasase lo que pasase, el chico seguiría a su superior. Si podían permitirse dejar a Hana de momento era porque algún plan tenía, o quizás luego la acompañaría a otro local o... algo. No le dio demasiada importancia entonces, realmente, pero le pareció realmente extraño.
Al llegar a un local llamado El Diamante Rojo, Ryu se acercó a una señora mayor para hablar con ella. La conversación estaba llena de adulaciones y halagos varios, todo con el objetivo de acabar ofreciendo a los chicos como empleados.
Tsuyoi no dudó en ser el primero en hablar, apuntándose a su pecho descubierto mientras sonreía con confianza.
— Cocino de muerte. —Dijo, orgulloso—. Podría explicarte lo bien que se me da, pero si tienes una cocina, puedo demostrártelo.
— Oye, oye, oye ¿cómo que "seguidme"? ¿No vamos a esperar a Hana?
Pasase lo que pasase, el chico seguiría a su superior. Si podían permitirse dejar a Hana de momento era porque algún plan tenía, o quizás luego la acompañaría a otro local o... algo. No le dio demasiada importancia entonces, realmente, pero le pareció realmente extraño.
Al llegar a un local llamado El Diamante Rojo, Ryu se acercó a una señora mayor para hablar con ella. La conversación estaba llena de adulaciones y halagos varios, todo con el objetivo de acabar ofreciendo a los chicos como empleados.
Tsuyoi no dudó en ser el primero en hablar, apuntándose a su pecho descubierto mientras sonreía con confianza.
— Cocino de muerte. —Dijo, orgulloso—. Podría explicarte lo bien que se me da, pero si tienes una cocina, puedo demostrártelo.