21/08/2022, 19:40
(Última modificación: 21/08/2022, 19:41 por Himura Hana. Editado 1 vez en total.)
— Kurokame Kurokami, la gran catastrofe
No solo no era la chica que buscaba sino que le había dado una respuesta tan extraña que Hana necesitó un par de segundos para entender que le había dado su nombre y un titulo y ambos sonaban terriblemente inventados. Sin embargo, no iba a ser la rubia quien le dijese qué nombres o titulos podía decir o dar.
— Oh, perdona. Me habré confundido. ¿Tienes algo que decirle a Kabin-san?
Si no era su compañera, automaticamente pasaba a posible sospechosa. Tenía que vigilar por ladrones, bandidos y otros maleantes que rondaran al artesano.
— Buenos días. — contestaría al señor del carro, vigilando a ambos con atención.
No solo no era la chica que buscaba sino que le había dado una respuesta tan extraña que Hana necesitó un par de segundos para entender que le había dado su nombre y un titulo y ambos sonaban terriblemente inventados. Sin embargo, no iba a ser la rubia quien le dijese qué nombres o titulos podía decir o dar.
— Oh, perdona. Me habré confundido. ¿Tienes algo que decirle a Kabin-san?
Si no era su compañera, automaticamente pasaba a posible sospechosa. Tenía que vigilar por ladrones, bandidos y otros maleantes que rondaran al artesano.
— Buenos días. — contestaría al señor del carro, vigilando a ambos con atención.