13/10/2022, 22:06
Minutos luego de que su padre salió de casa en busca de provisiones, la kunoichi escuchó su mención o más bien, que llamaban a uno de los Yuki que allí habitaban. Sayori no distinguió el origen de la voz hasta escuchar a Moguko hablar por segunda ocasión, formulando una simple pregunta.
«Esa voz es de… ¿Yamanouchi?»
Se preguntaba que podía estar haciendo ese día y por qué había decidido visitarla sin avisar, pero tampoco podía negarse a abrirle, después de todo ya estaba allí y alguna razón importante tendría. Aunque si al que buscaba era su padre por la reparación de algún objeto o arma, no habría más opción que esperar a que estuviese de regreso.
La Yuki vestía un atuendo casual con solo una camiseta gris sin mangas y un pantalón largo bastante cómodo, pues no estaba en servicio ese día. Aunque no abrió la puerta de inmediato tampoco hizo esperar a la kunoichi mucho tiempo, cuando se presentó ante su compañera vio que traía un aspecto como de preocupación y se veía agitada.
—Oi... Moguko… ¿pasó algo?
«Esa voz es de… ¿Yamanouchi?»
Se preguntaba que podía estar haciendo ese día y por qué había decidido visitarla sin avisar, pero tampoco podía negarse a abrirle, después de todo ya estaba allí y alguna razón importante tendría. Aunque si al que buscaba era su padre por la reparación de algún objeto o arma, no habría más opción que esperar a que estuviese de regreso.
La Yuki vestía un atuendo casual con solo una camiseta gris sin mangas y un pantalón largo bastante cómodo, pues no estaba en servicio ese día. Aunque no abrió la puerta de inmediato tampoco hizo esperar a la kunoichi mucho tiempo, cuando se presentó ante su compañera vio que traía un aspecto como de preocupación y se veía agitada.
—Oi... Moguko… ¿pasó algo?
«Pienso» l Hablo l Narro