1/11/2022, 16:40
Cegado y aturdido, el clon de Daigo se agachó en la oscuridad para evitar un posible ataque por parte de Pirámide Dorada. No sintió ningún impacto, así que creyó estar a salvo durante unos segundos, pero rápidamente sintió como su temperatura corporal subía, hasta que...
— ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAGH!
Sentía como su cuerpo ardía por dentro. Era insoportable, creía que en cualquier momento se encendería como una antorcha, pero antes de eso pudo sentir cómo su cuerpo se iba secando desde dentro y perdía las fuerzas para gritar. Solo entonces murió, desapareciendo en una muy leve cortina de humo que se mezcló con el vapor que había soltado.
Toda la información que el Kage Bunshin había recabado volvió entonces al Daigo original. Chillidos había muerto, el clon había desaparecido y no habían conseguido acertar un solo golpe al Trío de Sanbei. La tristeza y la ira invadieron su corazón. Su compañero había muerto por su culpa y en cambio Nathifa seguía allí, burlándose de ellos. La quería muerta.
«Nos sacaré de aquí. No dejaré que muera nadie más». Pero aunque estaba furioso, Tsukiyama Daigo nunca olvidaría cuál era su verdadero objetivo.
Excepto por uno de ellos, había visto cómo peleaba aquel grupo, los elementos que utilizaban y la forma en la que se comunicaban. La clave de la victoria sería utilizar toda la información que tenía a su favor.
Tan rápido como pudo, intentó alcanzar a Torbellino Dorado antes de que terminase de recuperarse de la bomba de luz para propinarle un puñetazo recto a la máscara (26 PV).
— ¡ESTO TERMINA AQUÍ! —Declaró. Seguro que de una manera u otra, todo se decidiría en los próximos minutos.
¿Sería esta su última batalla o aquel iba a ser el día en el que recuperaría su libertad? Fuese como fuese, Daigo estaba dispuesto a pelear hasta el final. Sin limitaciones.
— ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAGH!
Sentía como su cuerpo ardía por dentro. Era insoportable, creía que en cualquier momento se encendería como una antorcha, pero antes de eso pudo sentir cómo su cuerpo se iba secando desde dentro y perdía las fuerzas para gritar. Solo entonces murió, desapareciendo en una muy leve cortina de humo que se mezcló con el vapor que había soltado.
Toda la información que el Kage Bunshin había recabado volvió entonces al Daigo original. Chillidos había muerto, el clon había desaparecido y no habían conseguido acertar un solo golpe al Trío de Sanbei. La tristeza y la ira invadieron su corazón. Su compañero había muerto por su culpa y en cambio Nathifa seguía allí, burlándose de ellos. La quería muerta.
«Nos sacaré de aquí. No dejaré que muera nadie más». Pero aunque estaba furioso, Tsukiyama Daigo nunca olvidaría cuál era su verdadero objetivo.
Excepto por uno de ellos, había visto cómo peleaba aquel grupo, los elementos que utilizaban y la forma en la que se comunicaban. La clave de la victoria sería utilizar toda la información que tenía a su favor.
Tan rápido como pudo, intentó alcanzar a Torbellino Dorado antes de que terminase de recuperarse de la bomba de luz para propinarle un puñetazo recto a la máscara (26 PV).
— ¡ESTO TERMINA AQUÍ! —Declaró. Seguro que de una manera u otra, todo se decidiría en los próximos minutos.
¿Sería esta su última batalla o aquel iba a ser el día en el que recuperaría su libertad? Fuese como fuese, Daigo estaba dispuesto a pelear hasta el final. Sin limitaciones.
![[Imagen: IMG-20210515-202948-586.png]](https://i.ibb.co/fqtcMG8/IMG-20210515-202948-586.png)
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.