4/11/2022, 03:17
— Por supuesto que salté a ayudarte. Te dije que te protegería y que te entrenaría. Es lo natural. ¿Por qué ibas a estar a la defensiva?
Se rascó la nuca.
— Han pasado muchas cosas en muy poco tiempo y aún no sé cómo procesarlo... supongo. — tenía pocas seguridades ahora mismo, y Yuki le había demostrado que su protección era una de ellas.
Seguro que por eso estaba tan acelerada. Ya sabía que Yuki era honesta, cómo lo era ella, en realidad. Solo que su sensei tal vez no era del todo consciente de lo que decía, mientras que ella muchas veces tenía que cargar con el peso de su honestidad por saber exactamente cómo iba a reaccionar la otra parte incluso antes de hablar. Pero todo eso parecía cosa de la Kinumi del pasado.
Ahora no tenía clara ni su personalidad, era como si estuviese viviendo la vida de una extraña. No estaba en su casa, no estaba con sus padres y la villa en sí no parecía la misma. Todo de un día para el otro. Todo era demasiado raro, tal vez por ello la confianza en Yuki le crecía por momentos. Aún con esa confianza, era dificil hablar con ella, ya que apenas le daba respuesta alguna a casi nada de lo que decía.
Se quedó mirando como Yuki arreglaba el lio que ella había liado sin decir nada más, sujetandose la mano herida con la sana.
Se rascó la nuca.
— Han pasado muchas cosas en muy poco tiempo y aún no sé cómo procesarlo... supongo. — tenía pocas seguridades ahora mismo, y Yuki le había demostrado que su protección era una de ellas.
Seguro que por eso estaba tan acelerada. Ya sabía que Yuki era honesta, cómo lo era ella, en realidad. Solo que su sensei tal vez no era del todo consciente de lo que decía, mientras que ella muchas veces tenía que cargar con el peso de su honestidad por saber exactamente cómo iba a reaccionar la otra parte incluso antes de hablar. Pero todo eso parecía cosa de la Kinumi del pasado.
Ahora no tenía clara ni su personalidad, era como si estuviese viviendo la vida de una extraña. No estaba en su casa, no estaba con sus padres y la villa en sí no parecía la misma. Todo de un día para el otro. Todo era demasiado raro, tal vez por ello la confianza en Yuki le crecía por momentos. Aún con esa confianza, era dificil hablar con ella, ya que apenas le daba respuesta alguna a casi nada de lo que decía.
Se quedó mirando como Yuki arreglaba el lio que ella había liado sin decir nada más, sujetandose la mano herida con la sana.