21/11/2022, 15:38
— No he escuchado que quieras rendirte. Así que no te dejaré perder.
Que no se hubiese verbalizado no significaba nada, Chika ya no estaba ahí. Se puso en pie por inercia, asintió por costumbre y abrió la boca por educación.
— Sí.
Una vez en pie de nuevo, enfocó la mirada a Kimi, que la miraba preocupada. Normal, era la misma mirada que tantas veces le había dedicado ella a su hermana. La preocupación del fuerte. Temía haberle hecho daño.
— ¿Estás bien, Ka-chan?
Sonrió mientras volvía a ponerse su armadura de raiton, esta vez visiblemente menos intensa.
— Perfectamente — mintió sin inmutarse.
Su mente era algo mucho más debil que su cuerpo. Funcionando con procesos que ni ella entendía. Podía comprender la magnitud de sus sentimientos y sus posiciones, nunca las consecuencias. Estaba en un enorme lago helado ahora mismo. Su hermana, la persona a la que debía proteger porque era fragil y debil, era mucho más fuerte en combate que ella.
No había tenido suerte, no se había contenido y Kimi la había barrido con facilidad. Ese cambio de esquemas había partido la realidad de Chika. Si aquella persona a la que debía proteger era más hábil que ella en todos los aspectos, ¿qué era ella? ¿Cual era su proposito en todo esto? ¿De qué había servido entrenar? ¿Por qué se preocupaba por ella?
Mantenía la mirada fija en el combate, vigilante, pero en modo automatico. No tenía la capacidad de pensar en ese momento, solo reaccionaría y ya.
Que no se hubiese verbalizado no significaba nada, Chika ya no estaba ahí. Se puso en pie por inercia, asintió por costumbre y abrió la boca por educación.
— Sí.
Una vez en pie de nuevo, enfocó la mirada a Kimi, que la miraba preocupada. Normal, era la misma mirada que tantas veces le había dedicado ella a su hermana. La preocupación del fuerte. Temía haberle hecho daño.
— ¿Estás bien, Ka-chan?
Sonrió mientras volvía a ponerse su armadura de raiton, esta vez visiblemente menos intensa.
— Perfectamente — mintió sin inmutarse.
Su mente era algo mucho más debil que su cuerpo. Funcionando con procesos que ni ella entendía. Podía comprender la magnitud de sus sentimientos y sus posiciones, nunca las consecuencias. Estaba en un enorme lago helado ahora mismo. Su hermana, la persona a la que debía proteger porque era fragil y debil, era mucho más fuerte en combate que ella.
No había tenido suerte, no se había contenido y Kimi la había barrido con facilidad. Ese cambio de esquemas había partido la realidad de Chika. Si aquella persona a la que debía proteger era más hábil que ella en todos los aspectos, ¿qué era ella? ¿Cual era su proposito en todo esto? ¿De qué había servido entrenar? ¿Por qué se preocupaba por ella?
Mantenía la mirada fija en el combate, vigilante, pero en modo automatico. No tenía la capacidad de pensar en ese momento, solo reaccionaría y ya.