24/01/2023, 21:33
Hubo caminado durante varios minutos. Decenas de minutos, a decir verdad. El chico caminó a tanto como su resquebrajado chasis le permitía, hasta que topó con alguien cuyo interés o preocupación en lo ajeno era mayor a la que tenía sobre sus asuntos. No era algo extraño, era algo relativamente calculado. Era cuestión de tiempo que esa situación se diese.
*Crick* *Crick* *Crack*
El chico, cubierto en gran parte de la lluvia por el paraguas de la joven, llevó su mirada al brazo que no portaba el susodicho paraguas. Estaba extendido hacia él, ofertando su ayuda. Ésta saludó, afable. Tras ello acompañó el gesto con la pregunta. ¿Podía ayudarlo?.
¿Podía?.
El chico llevó su mirada entonces hacia el rostro de la chica, buscando ver quién era la que ofrecía ayuda de manera desinteresada.
*Crick* *Crick* *Crack*
Ese brusco sonido otra vez. Casi parecía causado por engranajes de metal chocando entre sí, en lo que desplazaban un trozo de madera u otro metal. Pero en apariencia, solo era el gesto del chico al ejecutarse. Apenas visto el rostro de la chica, el chico alzó levemente la suya, en un gesto que casi parecía decir que no era necesario.
*Crick* *Crick* *Crack*
Y otra vez pudo escucharse ese sonido tan peculiar. El chico pareció sonreir, parecía no requerir su ayuda. O al menos no pareció aceptarla.
—Estoy bien. Muchas gracias, señorita. —Contestó sin mover los labios siquiera.
Dada la distancia, y la poca práctica del chico, la chica podría diferenciar que claramente se trataba de un henge extraño, o quizás un clon. El detalle más peculiar era que no había movidos un solo músculo facial para hablar. No parecía ni necesitar respirar. Su torso no hacía esos movimientos comunes en cualquier ser humano.
*Crick* *Crick* *Crack*
El chico, cubierto en gran parte de la lluvia por el paraguas de la joven, llevó su mirada al brazo que no portaba el susodicho paraguas. Estaba extendido hacia él, ofertando su ayuda. Ésta saludó, afable. Tras ello acompañó el gesto con la pregunta. ¿Podía ayudarlo?.
¿Podía?.
El chico llevó su mirada entonces hacia el rostro de la chica, buscando ver quién era la que ofrecía ayuda de manera desinteresada.
*Crick* *Crick* *Crack*
Ese brusco sonido otra vez. Casi parecía causado por engranajes de metal chocando entre sí, en lo que desplazaban un trozo de madera u otro metal. Pero en apariencia, solo era el gesto del chico al ejecutarse. Apenas visto el rostro de la chica, el chico alzó levemente la suya, en un gesto que casi parecía decir que no era necesario.
*Crick* *Crick* *Crack*
Y otra vez pudo escucharse ese sonido tan peculiar. El chico pareció sonreir, parecía no requerir su ayuda. O al menos no pareció aceptarla.
—Estoy bien. Muchas gracias, señorita. —Contestó sin mover los labios siquiera.
Dada la distancia, y la poca práctica del chico, la chica podría diferenciar que claramente se trataba de un henge extraño, o quizás un clon. El detalle más peculiar era que no había movidos un solo músculo facial para hablar. No parecía ni necesitar respirar. Su torso no hacía esos movimientos comunes en cualquier ser humano.