26/02/2016, 00:17
Los ojos se posaron unos momentos en la cintura de esa pequeña mujer cuando esta se llevaba sus manos a la cara. Al parecer había notado su comida en el suelo y trataba de mostrar algún tipo de arrepentimiento. Pero lejos de ver su cara encontró en partes más inferiores de su cuerpo una bandana que la identificaba como kunoichi de Amegakure.
«Vaya, tenemos la misma profesión....»
La respuesta a la anterior pregunta de Karamaru había sido afirmativa pero a pesar de estar en buen estado la peliblanca trataba de enmendar los errores cometidos. El calvo no era tan tonto, él sabía que a pesar de venir distraído la que generó el golpe había sido la mujer, pero si se daba cuenta que estaba arrepentida. Además, nunca había que llevarse mal con ninjas de la aldea en la que uno vive.
Lo siento muchísimo, de verdad. Ha sido sin querer. Permiteme comprarte otro, por favor.
No hace....
—Tu nombre era... ¿Makuramo?— Preguntó descaradamente. —Me suenas mucho, aunque puede que sea normal si vivimos en la misma aldea.—
El monje se quedó unos segundos dubitativo tratando de entender quien mierda era Makuramo. Las dudas de Karamaru llegaron a la conclusión, tras ver la bandana, que seguramente eran ambos shinobis. Aunque ella todavía ni había visto la bandana del calvo.
Soy Karamaru, del clan Habaki- dijo dando la mano para estrechar. Finalmente podía hablar- Soy shinobi, al igual que ti. Tal vez de ese lugar recuerdas mi cara. Por otro lado, no, no hace falta que enmiendes tu error aunque aprecio el gesto. ¿Puedo preguntar por tu nombre?
El monje había pasado tan poco tiempo en la ciudad mientras iba a la academia y había prestado tan poca atención a las caras del resto de personas que poco sabía si había visto a esa mujer en alguna otra ocasión.
«Vaya, tenemos la misma profesión....»
La respuesta a la anterior pregunta de Karamaru había sido afirmativa pero a pesar de estar en buen estado la peliblanca trataba de enmendar los errores cometidos. El calvo no era tan tonto, él sabía que a pesar de venir distraído la que generó el golpe había sido la mujer, pero si se daba cuenta que estaba arrepentida. Además, nunca había que llevarse mal con ninjas de la aldea en la que uno vive.
Lo siento muchísimo, de verdad. Ha sido sin querer. Permiteme comprarte otro, por favor.
No hace....
—Tu nombre era... ¿Makuramo?— Preguntó descaradamente. —Me suenas mucho, aunque puede que sea normal si vivimos en la misma aldea.—
El monje se quedó unos segundos dubitativo tratando de entender quien mierda era Makuramo. Las dudas de Karamaru llegaron a la conclusión, tras ver la bandana, que seguramente eran ambos shinobis. Aunque ella todavía ni había visto la bandana del calvo.
Soy Karamaru, del clan Habaki- dijo dando la mano para estrechar. Finalmente podía hablar- Soy shinobi, al igual que ti. Tal vez de ese lugar recuerdas mi cara. Por otro lado, no, no hace falta que enmiendes tu error aunque aprecio el gesto. ¿Puedo preguntar por tu nombre?
El monje había pasado tan poco tiempo en la ciudad mientras iba a la academia y había prestado tan poca atención a las caras del resto de personas que poco sabía si había visto a esa mujer en alguna otra ocasión.
"El miedo es el camino al lado oscuro. El miedo lleva a la ira, la ira al odio, el odio al sufrimiento, y el sufrimiento al lado oscuro"
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘