26/02/2016, 12:46
La peliblanca escuchó la pregunta del rastas, al que le comía la curiosidad, pues había oído historias de la villa en la que nunca deja de llover, y aquello era algo que le fascinaba, ¿cómo era aquello posible? Aunque, como aún no había conocido a nadie de allí, no había podido verificar estas historias, hasta aquel día.
—Bueno, desde que tengo consciencia no he vivido un solo día de sol en Amegakure. No se si será verdad eso de que llueve siempre, pero lleva una rachita de mas de diez años seguro.—
¡Eran ciertas de verdad! No se lo podía creer, era muy raro.
— ¿De verdad? Guau, tiene que ser un poco triste no ver prácticamente el sol, ¿no? — Comentó el muchacho, dejando volar su imaginación. — Aunque bueno, imagino que todo es acostumbrarse. —
La chica volvió a mirar la carta tras la breve aparición del camarero, quizás se estuviera replanteando su elección, pero no era el caso, pues, apenas un instante después, le preguntó a Riko de donde era él.
''Espera... ¿Cómo que si TAMBIÉN soy genin?'' Se preguntó a si mismo.
Pero ante de poder responder a la chica, y más importante, antes de resolver su duda, el camarero se acercó a la mesa para tomarles nota, a lo que Katomi no tardó en contestar, y Riko no iba a ser menos.
— Yo uno de chocolate blanco con nata, por favor. —
Una vez el chico apuntó su pedido, se dirigió al interior del local, y ahora podían seguir con su conversación hasta que les trajeran sus batidos.
— Pues esto... — Comenzó señalándose la placa de metal que se encontraba en su cuello. — ... es de Uzushiogakure. Pero una pregunta, ¿Cómo que si también soy genin? ¿Tú eres shinobi? ¿Por qué he visto tu bandana entonces? —
—Bueno, desde que tengo consciencia no he vivido un solo día de sol en Amegakure. No se si será verdad eso de que llueve siempre, pero lleva una rachita de mas de diez años seguro.—
¡Eran ciertas de verdad! No se lo podía creer, era muy raro.
— ¿De verdad? Guau, tiene que ser un poco triste no ver prácticamente el sol, ¿no? — Comentó el muchacho, dejando volar su imaginación. — Aunque bueno, imagino que todo es acostumbrarse. —
La chica volvió a mirar la carta tras la breve aparición del camarero, quizás se estuviera replanteando su elección, pero no era el caso, pues, apenas un instante después, le preguntó a Riko de donde era él.
''Espera... ¿Cómo que si TAMBIÉN soy genin?'' Se preguntó a si mismo.
Pero ante de poder responder a la chica, y más importante, antes de resolver su duda, el camarero se acercó a la mesa para tomarles nota, a lo que Katomi no tardó en contestar, y Riko no iba a ser menos.
— Yo uno de chocolate blanco con nata, por favor. —
Una vez el chico apuntó su pedido, se dirigió al interior del local, y ahora podían seguir con su conversación hasta que les trajeran sus batidos.
— Pues esto... — Comenzó señalándose la placa de metal que se encontraba en su cuello. — ... es de Uzushiogakure. Pero una pregunta, ¿Cómo que si también soy genin? ¿Tú eres shinobi? ¿Por qué he visto tu bandana entonces? —
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»