2/03/2016, 19:13
Un día como cualquier otro en Amegakure, una fina capa de lluvia caía del cielo como era costumbre, la cual Mogura acostumbraba a combatir usando un paraguas y un abrigo de cuero.
Para su buena suerte, en el momento en que la lluvia comenzó a tomar fuerza ya había llegado a su destino. El torreón de prueba de la aldea, era ademas de un punto de referencia, un lugar donde se podría llegar a ver un buen combate entre shinobi e incluso poder ser parte de uno.
Espero que haya alguien dentro...
Pensaba para si mismo mientras ingresaba en la construcción. Todavía no se terminaba de decidir que es lo que quería hacer en aquel lugar, que es lo que realmente quería, si entrenar o ver a la gente lanzarse metal y técnicas de diferentes niveles.
Oh...
No había nadie, el lugar estaba vacío, la soledad reinaba en las gradas de aquella arena. Solo se encontraba él y si mismo, lo cual no sumaban dos.
Supongo que llegué temprano
Exclamó mientras tomaba asiento en un lugar cercano a la entrada que utilizó. Reposó su paraguas a un lado y se quedó mirando el techo, esperando a que algo suceda.
Para su buena suerte, en el momento en que la lluvia comenzó a tomar fuerza ya había llegado a su destino. El torreón de prueba de la aldea, era ademas de un punto de referencia, un lugar donde se podría llegar a ver un buen combate entre shinobi e incluso poder ser parte de uno.
Espero que haya alguien dentro...
Pensaba para si mismo mientras ingresaba en la construcción. Todavía no se terminaba de decidir que es lo que quería hacer en aquel lugar, que es lo que realmente quería, si entrenar o ver a la gente lanzarse metal y técnicas de diferentes niveles.
Oh...
No había nadie, el lugar estaba vacío, la soledad reinaba en las gradas de aquella arena. Solo se encontraba él y si mismo, lo cual no sumaban dos.
Supongo que llegué temprano
Exclamó mientras tomaba asiento en un lugar cercano a la entrada que utilizó. Reposó su paraguas a un lado y se quedó mirando el techo, esperando a que algo suceda.