11/03/2016, 17:16
El chico parecía querer resistirse a reír, tanto como Katomi o mas, pero también cayó en la carcajada. No podía parar de reír tampoco, pese a que había intentado echarle un rapapolvo de que no estaba bien reírse de desgracias ajenas. Realmente, hasta él había visto el humor en esa escena, era algo que no podía remediar u ocultar.
Katomi, que reía frente a él, no podía ni contestarle. ¿Qué decirle a alguien a quien se le había escapado media casa y el paraguas? En serio, no habían palabras de las que tirar. La contagiosa risa había hecho su función, y ambos estuvieron un buen rato con ésta.
—Bueno... menos mal que no estabas haciéndote la comida allí dentro, porque te veía tirándote de los pelos... jajaja.— Comentó entre risas.
Para cuando comentó eso, intentaba calmar la risa, y se secaba las lágrimas de los ojos. Hasta le había empezado a doler el costado, una punzada de lo agudo que había sido el ataque de risa.
—Bueno, Mogura. ¿Qué hacías aquí? Si estabas trabajando en arreglar esa choza, no vas por buen camino, creo... jajaja.—
Con ello abrió un nuevo camino en el dialogo, a la vez que daba a relucir que esa choza era un auténtico peligro.
Katomi, que reía frente a él, no podía ni contestarle. ¿Qué decirle a alguien a quien se le había escapado media casa y el paraguas? En serio, no habían palabras de las que tirar. La contagiosa risa había hecho su función, y ambos estuvieron un buen rato con ésta.
—Bueno... menos mal que no estabas haciéndote la comida allí dentro, porque te veía tirándote de los pelos... jajaja.— Comentó entre risas.
Para cuando comentó eso, intentaba calmar la risa, y se secaba las lágrimas de los ojos. Hasta le había empezado a doler el costado, una punzada de lo agudo que había sido el ataque de risa.
—Bueno, Mogura. ¿Qué hacías aquí? Si estabas trabajando en arreglar esa choza, no vas por buen camino, creo... jajaja.—
Con ello abrió un nuevo camino en el dialogo, a la vez que daba a relucir que esa choza era un auténtico peligro.