16/03/2016, 13:28
Su tío se cruzó de brazos, y cuando Ayame se atrevió a alzar de nuevo la mirada hacia él comprobó que había torcido el gesto en una mueca. No le había convencido.
<<Oh, oh...>>> Ayame tensó los hombros.
—Veamos... —comenzó a husmear—. Sales en mitad de la noche, sola... Con equipaje. Cuando nadie te ve, sin pedir permiso. ¿Y tú te vas a ir a entrenar varios días?
—Yo... yo... —balbuceó Ayame, estremeciéndose por la presión de la mentira. Había vuelto a desviar la mirada, y en un gesto inconsciente se ajustó la cinta de tela sobre la frente—. No quería preocupar a mi padre y a mi hermano... Se pondrían demasiado pesados si se me ocurría hacerlo durante el día, así que... les he dejado una nota... —aquellas últimas dos palabras sonaron ahogadas en sus labios.
—¡Ay, pero qué loca estás! —exclamó Karoi, y Ayame cerró los ojos con fuerza antes de darse cuenta de que no era una reprimenda. Había estado esperando que su tío descubriera su farsa en cualquier momento, pero en lugar de ello había avanzado hacia ella y la había estrechado en un abrazo. La muchacha creyó sentir que su corazón se desgajaba un poquito más—. Si necesitabas ayuda sólo tenías que pedírmelo.
—No, yo... —comenzó a decir, con un hilo de voz, pero su tío se había separado de ella y había comenzado a caminar en otra dirección.
—Vamos, vayamos al lago. Te enseñaré más sobre esa técnica. Esperaba que aprendieras más por ti misma, pero te voy a echar un cable.
—N...
—La verdad es que odiaría verte perder. Y así puedo ver la cara que se le queda a tu padre cuando vea la técnica contra tu oponente.
—¡No! —Ayame ahogó una exclamación y retrocedió un único paso. Había terminado gritando sin darse cuenta. En un futil intento por arreglarlo, esbozó una sonrisa que sintió extraña en sus labios—. Te lo agradezco pero no... no es necesario, de verdad, tío. La técnica ya casi está dominada... Sólo necesito unos intentos más... Y prefiero hacerlo por mi cuenta, de verdad.
De entre todas las personas en el mundo, ¿por qué había tenido que toparse precisamente con Karoi? Sólo hacía las cosas más difíciles...
Tenía que largarse de allí cuanto antes.
<<Oh, oh...>>> Ayame tensó los hombros.
—Veamos... —comenzó a husmear—. Sales en mitad de la noche, sola... Con equipaje. Cuando nadie te ve, sin pedir permiso. ¿Y tú te vas a ir a entrenar varios días?
—Yo... yo... —balbuceó Ayame, estremeciéndose por la presión de la mentira. Había vuelto a desviar la mirada, y en un gesto inconsciente se ajustó la cinta de tela sobre la frente—. No quería preocupar a mi padre y a mi hermano... Se pondrían demasiado pesados si se me ocurría hacerlo durante el día, así que... les he dejado una nota... —aquellas últimas dos palabras sonaron ahogadas en sus labios.
—¡Ay, pero qué loca estás! —exclamó Karoi, y Ayame cerró los ojos con fuerza antes de darse cuenta de que no era una reprimenda. Había estado esperando que su tío descubriera su farsa en cualquier momento, pero en lugar de ello había avanzado hacia ella y la había estrechado en un abrazo. La muchacha creyó sentir que su corazón se desgajaba un poquito más—. Si necesitabas ayuda sólo tenías que pedírmelo.
—No, yo... —comenzó a decir, con un hilo de voz, pero su tío se había separado de ella y había comenzado a caminar en otra dirección.
—Vamos, vayamos al lago. Te enseñaré más sobre esa técnica. Esperaba que aprendieras más por ti misma, pero te voy a echar un cable.
—N...
—La verdad es que odiaría verte perder. Y así puedo ver la cara que se le queda a tu padre cuando vea la técnica contra tu oponente.
—¡No! —Ayame ahogó una exclamación y retrocedió un único paso. Había terminado gritando sin darse cuenta. En un futil intento por arreglarlo, esbozó una sonrisa que sintió extraña en sus labios—. Te lo agradezco pero no... no es necesario, de verdad, tío. La técnica ya casi está dominada... Sólo necesito unos intentos más... Y prefiero hacerlo por mi cuenta, de verdad.
De entre todas las personas en el mundo, ¿por qué había tenido que toparse precisamente con Karoi? Sólo hacía las cosas más difíciles...
Tenía que largarse de allí cuanto antes.