21/03/2016, 18:33
Zetsuo leyó a través de la mente de su hija como nunca antes había deseado hacerlo, y detectó enseguida qué era lo que tenía pensado hacer. Extendió una mano, creando una barrera imaginaria entre ella y el lago, y casi se podría decir que la propia presencia del hombre forzó a la muchacha a mirarle a los ojos. Unos ojos que, Ayame comprendió, contenían ira, pero que sobretodo, reflejaban preocupación y miedo. Miedo. Un tono de color que la paleta de Zetsuo jamás había contenido.
—Ayame —repitió Zetsuo—. Podríamos tener enemigos por todas partes. Y como acabas de ver, tenemos enemigos entre nuestra propia aldea. En tu propio clan. —Su voz era imponente y dura como siempre, pero también emanaba tranquilidad, toda la que Zetsuo podía sacar de aquella situación—. ¿A dónde ibas a ir? ¿Con quién ibas a ir? ¿Crees que puedes valerte por ti sola?
Hizo una pausa y dio un largo y tendido suspiro.
—Decías en la nota que no te volverán a usar en contra de tu voluntad. ¿Qué crees que estaba pasando aquí? —señaló tras de sí, al cadáver del hombre que flotaba en el río—. ¿Qué crees que pasaría si alguien más descubre que eres una jinchuuriki?
Dio un paso adelante.
—¿Es que no piensas en lo que podría pasarte, niña?
—Ayame —repitió Zetsuo—. Podríamos tener enemigos por todas partes. Y como acabas de ver, tenemos enemigos entre nuestra propia aldea. En tu propio clan. —Su voz era imponente y dura como siempre, pero también emanaba tranquilidad, toda la que Zetsuo podía sacar de aquella situación—. ¿A dónde ibas a ir? ¿Con quién ibas a ir? ¿Crees que puedes valerte por ti sola?
Hizo una pausa y dio un largo y tendido suspiro.
—Decías en la nota que no te volverán a usar en contra de tu voluntad. ¿Qué crees que estaba pasando aquí? —señaló tras de sí, al cadáver del hombre que flotaba en el río—. ¿Qué crees que pasaría si alguien más descubre que eres una jinchuuriki?
Dio un paso adelante.
—¿Es que no piensas en lo que podría pasarte, niña?