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Riko · 12/05/2018, 23:19

—Yo voto por quedarnos un poco más de tiempo, sí avanzamos muy rápido quizá podamos toparnos con ellos, no sabemos cuánta gente nos está buscando.

Tal y como imaginaba Keisuke optó por lo más seguro, que sin duda era quedarse allí por un tiempo, esperando a que los que les perseguían se alejasen lo suficiente como para no correr peligro.

— Está bien, nos quedaremos un poco aquí, en el caso de que decidan volver, podremos volver a escondernos si hace falta.

Relató el peliblanco, mientras caminaba por el lago mirando a todo lo que le rodeaba, buscando posibles salidas de emergencia en caso de que tuvieran que huir de allí.

— Joder, qué hambre tengo... — Exclamó recordando su pollo que no había podido terminarse.

Keisuke · (Última modificación: 12/05/2018, 23:29 por Keisuke.)

Senju concordó con mi idea de permanecer unos minutos más en la seguridad de aquel lago oculto, no obstante, él no optó por descansar ni un minuto, caminó por todo el lugar en busca de algo que no yo mismo sabía qué era, sin embargo, no intervendría en su labor, era mejor hacer eso que nada.

—Sí, yo también tengo hambre.— Admití poniendo mi mano en mi estómago, el agua podía engañar por un tiempo la sensación de vacío en mi interior, pero no tardaría mucho en volver.

—¿Quienes crees que sean ellos?— Pregunté al aire. —Al parecer el rumor de los rituales es cierto y ellos son los que lo realizan.— Respondí usando la lógica, pero nada más llegó a mi mente, no pude ver ningún símbolo, ningún dato clave, no parecían ser shinobis, a excepción de su líder, quien sin dudas tenía algún tipo de habilidad peculiar....

—Habló en nuestras mentes...— Murmuré para mi.

Riko · 12/05/2018, 23:39

—¿Quienes crees que sean ellos? Al parecer el rumor de los rituales es cierto y ellos son los que lo realizan.

Riko dudó por unos instantes.

— Eso parece, pero no sabemos qué tipo de rituales son, y la verdad que prefiero no descubrirlo... — Dijo el peliblanco sin dudar. — Lo que sí es cierto es que el mohicano parecía ser el jefecillo y el resto no hacían más que seguir sus órdenes, ¿no?

El único que había dado órdenes, al que les habían llevado al capturarlos era él, eso quería decir sin duda alguna que estaba al mando.

— ¡Oye chicos! Mirad, que la verdad que ya me habéis empezado a aburrir jugando al escondite, quizás me pasé dándoos tiempo, así que... ¡De nada! Os voy a dejar ya tranquilos, ¿sí? Que empieza a hacerse tarde y me esperan en casa. — Rió por lo bajo. — Ale, ¡pasadlo bien!

Y la voz en sus cabezas, tal como vino, se fue.

Keisuke · 13/05/2018, 00:02

—Exactamente, él era el líder, aunque no sabemos sí hay alguien por encima de él...— Consideré la posibilidad de que quizá hubiera alguien más fuerte, alguien que realmente manejase todo desde las sombras, ¿cual era el beneficio de los rituales que hacían? ¿A qué dios o a quién se los ofrecian?

Y cuando más seguro me sentía, su voz apareció nuevamente en mi cabeza.— ¡Oye chicos! Mirad, que la verdad que ya me habéis empezado a aburrir jugando al escondite, quizás me pasé dándoos tiempo, así que... ¡De nada! Os voy a dejar ya tranquilos, ¿sí? Que empieza a hacerse tarde y me esperan en casa. Ale, ¡pasadlo bien!

—¿Qué?— Me levanté y miré al albino. —Él simplemente se aburrió y se va a casa...— Repetí incrédulo. —Sí que le falta un tornillo a ese sujeto!— Ahora miré al pasillo por el cual llegamos.

—Espero no sea un truco...— Caminé hacia donde estaba Riko y alcé mi derecha. —Aprovecharé esta oportunidad para irme.— Estreché su mano. —La próxima vez reunámonos en un lugar más tranquilo y sin tanto loco suelto jaja.— Reí y luego me esfumé.

Riko · 13/05/2018, 00:10

—¿Qué? Él simplemente se aburrió y se va a casa... Sí que le falta un tornillo a ese sujeto!

Riko se había quedado en shock, no podía creérselo, todo había acabado tan repentinamente como había empezado, por un motivo tan simple como el aburrimiento del que los había mandado cazar.

— Desde luego... Maldito lunático.. — Respondió el joven. — Que te vaya todo bien y sí, a ver si e próximo encuentro es más tranquilo. — Dijo ante la despedida del pelirrojo, que se esfumó justo después y Riko hizo lo propio, formó el sello pertinente y se esfumó de allí.