31/08/2021, 21:27
La explicación sobre Suiken era increíble. Metal movido por magnetismo ¿Era una especie de ninjutsu? ¿O había otro truco? El movimiento del metal ese era muy... natural. No parecía casi una técnica. Era como si fuese una extensión de ella.
La Nara le gustaba su propia técnica poco usual. Pero Meme parecía apasionarse cuando hablaba de la suya. Se ponía feliz por ella, por saber lo tanto que le gustaba.
—Si, es hermoso Meme. Además, te queda muy lindo cuando lo conviertes en ropa. — estaba viendo como manipulaba el material.
Con respecto a las armas, quizá la kusajin tenía razón. Podía dejarlas allí tiradas y listo. Una parte de ella pensaba que no era lo correcto, tenía miedo que alguien pueda tomarlas. O el simple hecho de dejarlas tiradas ahí, por no haber limpiado una zona verde.
Pero era hipócrita de su parte dársela de moralista. Ella era la primera en tomar el camino incorrecto. Nada iba a pasar si las dejaba ahí.
—Puede que tengas razón, que más da.
Tiró la tanto al piso, al lado del bastón. Se limpió las manos con sus propias prendas, vaya a saber donde habrán metido las manos esos tipos. No era tan delicada como Meme, pero si le daban un poco de asco esos hombres.
—¿Qué? — la tomó un poco por sorpresa. El breve enfrentamiento que tuvieron la hicieron olvidarse de que estaban bailando. —¡Si, claro! O, bueno, eso intentaba. Aunque si me siento un poco más suelta.
Abrió los brazos, en una especie de estiramiento, tomó bastante aire y lo soltó luego de unos segundos.
Al verla haber hecho una vuelta hace solo un rato, quiso hacer una imitación. Aunque a su forma. Uso una pierna como ancla, la cual se quedaría quieta y con la otra giraba, dando unas pisadas algo extrañas. Mientras tanto, daba unos aplausos y le sonreía de oreja a oreja a Meme, buscando en su mirada aceptación en lo que hacía.
La Nara le gustaba su propia técnica poco usual. Pero Meme parecía apasionarse cuando hablaba de la suya. Se ponía feliz por ella, por saber lo tanto que le gustaba.
—Si, es hermoso Meme. Además, te queda muy lindo cuando lo conviertes en ropa. — estaba viendo como manipulaba el material.
Con respecto a las armas, quizá la kusajin tenía razón. Podía dejarlas allí tiradas y listo. Una parte de ella pensaba que no era lo correcto, tenía miedo que alguien pueda tomarlas. O el simple hecho de dejarlas tiradas ahí, por no haber limpiado una zona verde.
Pero era hipócrita de su parte dársela de moralista. Ella era la primera en tomar el camino incorrecto. Nada iba a pasar si las dejaba ahí.
—Puede que tengas razón, que más da.
Tiró la tanto al piso, al lado del bastón. Se limpió las manos con sus propias prendas, vaya a saber donde habrán metido las manos esos tipos. No era tan delicada como Meme, pero si le daban un poco de asco esos hombres.
—¿Qué? — la tomó un poco por sorpresa. El breve enfrentamiento que tuvieron la hicieron olvidarse de que estaban bailando. —¡Si, claro! O, bueno, eso intentaba. Aunque si me siento un poco más suelta.
Abrió los brazos, en una especie de estiramiento, tomó bastante aire y lo soltó luego de unos segundos.
Al verla haber hecho una vuelta hace solo un rato, quiso hacer una imitación. Aunque a su forma. Uso una pierna como ancla, la cual se quedaría quieta y con la otra giraba, dando unas pisadas algo extrañas. Mientras tanto, daba unos aplausos y le sonreía de oreja a oreja a Meme, buscando en su mirada aceptación en lo que hacía.