Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
29/02/2016, 15:08 (Última modificación: 29/02/2016, 15:14 por Sasagani Yota.)
La estrategia a seguir era bien simple y había sido desplegada desde un primer momento. en el instante en que la gennin se movió hacia la parte superior del pilar yo hice lo propio pero yendo a la parte inferior del mismo pilar al tiempo que tras una breve carrera de sellos, colocaba un bunshin que iba a ser utilizado como cebo. con ello conseguía que se fijase en mi falso yo y, si mordía el anzuelo podría atacar sin problemas y en caso contrario subiría al pilar atacando por la espalda.
Pero Eri optó por la primera opción.
Saltó y su puño se cargó de chakra al instante. Se había lanzado a todo o nada.
*analizar a tu rival, conocer sus puntos fuertes, pero sobre todo los débiles*
Aquellas eran solamente algunas de las directrices que me había inculcado Setsuna-sensei. empezaba a dudar de que toyo lo hubiese hecho también con la peliazul que no había dudado ante las provocaciones del clon.
*Serpiente* pensaba mientras realizaba el sello que representaba la serpiente y abría mi boca de par en par ¡Raiton: Gian!*
Calculé el salto de la muchacha y de mi boca surgió una lanza eléctrica que se dirigiría a la zona de aterrizaje de mi ahora rival al mismo tiempo que el bunshin se deshacia en una ligera nube de humo, mezclada por el polvo que surgió tras el destrozo de la superficie del golpe de la kunoichi.
¿Vería venir el ataque sorpresa? Solo era cuestión de tiempo averiguarlo.
¤ Raiton: Gian ¤ Elemento Rayo: Falsa Oscuridad - Tipo: Ofensivo - Rango: B - Requisitos: Raiton 20 - Gastos: 24 CK - Daños: 40 PV - Efectos adicionales:(Raiton 80) Puede ser disparado con un movimiento en zig-zag, primero hacia un flanco, y luego hacia el objetivo - Sellos: Serpiente - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones: El rayo puede recorrer una distancia de 10 metros antes de disiparse
El usuario, tras realizar el sello correspondiente, emite electricidad en forma de lanza a través de su boca, que envía hacia su enemigo tratando de que impacte contra su cuerpo. Es una técnica con un buen poder destructivo, ya que es capaz de atravesar incluso la roca. El usuario puede lanzar otra lanza más pasados unos segundos desde el lanzamiento de la primera.
Un Ninjutsu que crea una copia intangible del cuerpo del usuario, sin ningún tipo de sustancia ni solidez. Puesto que el clon, por sí mismo, no tiene la habilidad de atacar, y sólo puede utilizarse pues para confundir al enemigo, normalmente empleado en combinación con otro tipo de Ninjutsu o tácticas. Es una técnica muy básica, pero con ingenio puede utilizarse de forma efectiva. Los clones se disipan cuando entran en contacto con cualquier cosa. Pueden ser fácilmente diferenciados de una persona por usuarios de Dōjutsu. Un usuario con ojos normales puede también distinguir los clones del original, puesto que éstos no tienen sombra y no causarán perturbaciones en el área que les rodea (no levantarán polvo, aplastarán la hierba, etc).
AO desvelada: Cuando corres hacia el pilar aprovecho para colocarme bajo el pilar al mismo tiempo que dejo un bunshin ejn mi posición inicial que es al que atacas.
29/02/2016, 19:28 (Última modificación: 29/02/2016, 19:29 por Uzumaki Eri.)
Pues no le había dado.
Nada más rozar su extremidad superior izquierda contra lo que venía a ser Yota, éste desapareción con un plof, formándose una nube de humo para que la joven peliazul impactase en el suelo, haciendo que este se rompiese en pequeños pedazos para que volasen por los aires. ''Creo... Que debería cambiar de táctica'' Se dijo para sí misma.
Entonces escuchó algo en sus espaldas, como un silbido, algo extraño para ella. Pero no tenía tiempo para descubrirlo, ''mierda, no, no hay que ponerse nerviosa''. Aprovechó la posición que tenía, agachada y con el puño incrustado en el suelo hecho pedazos de falsos pétalos; y con un impulso terminó por dar una voltereta hacia atrás, cayendo delante de ella una especie de lanza brillante. ¿Sería aquello el silbido que había escuchado?
''Por los pelos...'' Antes de sentirse aliviada, la huérfana, con el trasero pegado en el suelo se incorporó de un salto y miró al verdadero Yota, que se encontraba en su pilar, justo hacia el lugar donde ella había rodado, por ello tuvo que subir la vista para encararle.
Optó por tirarle un shuriken aprovechando su cercanía, más el arma iría justo hacia su cara, aprovechando así por si saltaba hacia arriba para esquivarlo; y sin espera, detrás iría ella, sacando el kunai que se encontraba bajo su manga izquierda, con el objetivo de penetrar con él en su brazo derecho.
Lo acababa de ver era una autentica demostración de reflejos. No me faltó ver mucho más para saber que mis posibilidades de éxito en aquella pelea eran tan remotas que prácticamente brillaban por su ausencia. Con aquel despiste, atacando por su espalda, fui incapaz de hacerle un solo rasguño ya que la lanza de rayo siguió su camino hasta desaparecer al impactar al pilar de roca del otro extremo.
Chasquee la lengua mientras observaba su pirueta.
Joder, pero no daba una maldita tregua, estaba dispuesta a dar el primer golpe, ya lo creo que lo estaba. Y probablemente el último también. Un estrella de acero emprendió el vuelo, despegando de entre los dedos de la kunoichi, directa a mi sien. Vale, me había sorprendido inicialmente pero seguía tomándome a la ligera. Me bastó con inclinar ligeramente el cuello para que esté pasase de largo y se clavase en el pilar que tenía justo a mis espaldas. Eri seguía corriendo hacia mí a saber con que propósito, aunque no tarde en descubrirlo al ver que la punta afilada de un kunai asomaba por su manga izquierda. Saqué el que reposaba en mi manga derecha y aunque en un principio trato de apuñalarme el antebrazo, pude apañarmelas para hacer sonar aquella música de acero y bloquear la embestida.
*¿Por qué es tan directa? ¿Tanta pinta de mequetrefe tengo?* me dije para mis adentros.
No lo dude y con la misma mano derecha le agarre el brazo izquierdo y dándome la vuelta rápidamente la empotre contra la pared con un ágil y rápido movimiento de tal forma que acabaría clavándose su propio kunai en la espalda.
-¿En serio pretendías darme ese puñetazo? ¡Menos mal que me dio por hacer lo del bunshin, llegas a darme con eso y me desmontas en pedacitos!-
Estaba asustado. Nada le impedía volver a intentarlo y quién sabe si en ese hipotetico segundo intento lograría acertar en el blanco.
*Menos mal que esto tenía que ser un "entrenamiento"...*
1/03/2016, 22:30 (Última modificación: 1/03/2016, 22:35 por Uzumaki Eri.)
El shuriken lo había esquivado con tan suma facilidad que envidió sus reflejos por un momento, ¡creía que había calculado bien! Bueno, quizás había menospreciado la percepción de su ahora rival... Aunque viniendo de alguien de Uzushiogakure, quizá sí se lo debería haber imaginado. Al igual que hizo chocar su kunai, que había reposado bajo su manga desde el principio; con el suyo propio, negándole de nuevo su ofensiva.
El pelirrojo, con la misma mano derecha con la que había usado su kunai para detener su ataque, la aprovechó para sujetarla de su propia mano buena y lanzarla contra el pilar, pero la chica, tomando el impulso de la fuerza de su compañero y la propia, además de la cercanía que tenía con el pilar, paró el impacto sujetándose con ambos pies, posándolos y transmitiendo chakra a éstos para que no se cayese contra el suelo, acuclillada sobre la superficie.
Sin perder de vista a su enemigo caminó hasta colocarse en una posición erguida encima del pilar, quedando con la mirada dirigida hacia abajo en aquellos momentos.
''Debería dejar de tomarme todas las peleas que hago en serio...'' Se sorprendió reprochándose a sí misma en sus adentros, mordiéndose el labio con nerviosismo.
-¿En serio pretendías darme ese puñetazo? ¡Menos mal que me dio por hacer lo del bunshin, llegas a darme con eso y me desmontas en pedacitos!-
-Al menos yo no te he intentado freír cual espárrago... - Contestó en un tono sumamente bajo, mirándolo con un brillo de duda pintado en sus ojos verdosos.
Es por eso por lo que no hacía promesas.
Negó con la cabeza mientras se dejaba caer detrás del cilindro, intentándose ocultar de los ojos carmesíes del Sasagani.
2/03/2016, 15:07 (Última modificación: 2/03/2016, 15:09 por Sasagani Yota.)
-Al menos yo no te he intentado freír cual espárrago... - Contestó en un tono sumamente bajo, mirándolo con un brillo de duda pintado en sus ojos verdosos.
-Oh vamos, eso te hubiera hecho daño, si-le reproché, aunque entendía que la posibilidad de que un rayo le impactase le impresionase-Pero ese puñetazo me hubiese enviado directamente al hospital, y eso con suerte. ¡Oh! ¡Ya lo entiendo! ¿Quieres eso verdad? Enviarme al hospital para cuidar de mí ¿No es así?-
Vale, quizás había tomado demasiadas conclusiones juntas a la vez. Pero instintivamente mi mente al ver aquel golpe contra el suelo empezó a pensar en amputaciones traumaticas o cosas por el estilo. Pero el combate seguía tras mi fallido intento de empotrarla contra la pared. Al menos había aprendido algo. Por fuerza no iba a ganar. Por el momento todo iba bien, no había sufrido daños y estaba aprendiendo cosas sobre Eri que me ayudarían a tomar decisiones durante el transcurso de la pelea. Sin embargo, ella tampoco había sufrido daños. Y ahora se había escondido tras aquel pilar.
*¿En serio piensa que bordearé el pilar para que me de un galletón de esos? ¡Ni loco!*
Lo que hice fue coger el shuriken que había quedado clavado y lo guardé en mis portaobjetos. Nunca había que decir que no a un detalle como aquel. Justo después me alejé del pilar en el que habíamos combatido hasta el momento haciendo marcha atrás, preparándome para que lo estuviera por venir, echando ojeadas rápidas a ambos lados como a la parte superior de tal manera que si lanzaba una arma o si directamente aparecía ella para reanudar la pelea me daría cuenta.
-Oh vamos, eso te hubiera hecho daño, si, pero ese puñetazo me hubiese enviado directamente al hospital, y eso con suerte. ¡Oh! ¡Ya lo entiendo! ¿Quieres eso verdad? Enviarme al hospital para cuidar de mí ¿No es así?
''¿No estarás hablando de ti mismo?'' Ese pensamiento se coló en su mente para no abrir la boca mientras estaba escondida detrás de su asignado pilar, esperando respuesta del pelirrojo, o al menos que la fuera a buscar, no sé, algún signo ofensivo hubiera bastado, pero no, el chico se había quedado allí, quietecito.
Entrecerró los ojos pensando en una posible estrategia.
Sopesando la primera que había pensado y que hubiera realizado si no llega a ser por la pasividad de su contrincante, ahora su clon hubiese sido explotado a escasos centímetros de su posición, pero bueno, menos daba una piedra creada por doton. En fin, desechada se hallaba mientras guardaba su kunai de nuevo en el sitio que le estaba asignado.
Tic tac, tic tac, tic tac.
Una serie de sellos fueron realizados y de repente de detrás del pilar y contra Yota se abalanzarían cuatro copias exactas de la Mizumi, que terminarían por chocar frente al poseedor de los ojos carmesí para crear una cortina de humo que durase lo suficiente para que de la mano de la kunoichi de Uzushiogakure saliese un shuriken directo al cuerpo del mayor, y, sin dejar apenas espacio de tiempo entre todos aquellos movimientos, ella misma se lanzó mientras se disipaba el humo restante con la mano izquierda embadurnada en un color rosa pálido.
Un Ninjutsu que crea una copia intangible del cuerpo del usuario, sin ningún tipo de sustancia ni solidez. Puesto que el clon, por sí mismo, no tiene la habilidad de atacar, y sólo puede utilizarse pues para confundir al enemigo, normalmente empleado en combinación con otro tipo de Ninjutsu o tácticas. Es una técnica muy básica, pero con ingenio puede utilizarse de forma efectiva. Los clones se disipan cuando entran en contacto con cualquier cosa. Pueden ser fácilmente diferenciados de una persona por usuarios de Dōjutsu. Un usuario con ojos normales puede también distinguir los clones del original, puesto que éstos no tienen sombra y no causarán perturbaciones en el área que les rodea (no levantarán polvo, aplastarán la hierba, etc).
¤ Ōkashō ¤ Impacto de la Flor de Cerezo - Tipo: Ofensivo - Rango: C - Requisitos: Iryō-Nin 10 - Gastos:
12 CK
(Iryō-Nin 20) (multiplicable x2)
(Iryō-Nin 40) (multiplicable x3)
(Iryō-Nin 60) (multiplicable x4)
(Iryō-Nin 80) (multiplicable x5)
(Iryō-Nin 100) (multiplicable x6)
- Daños: +20 PV al daño por taijutsu básico - Efectos adicionales:(Irō-Nin 100) En la forma activa o liberada del Sōzō Saisei, el usuario puede coger chakra de la reserva y gastar 0.6*X CK para causar X PV extra (máximo total de daño: 300 PV) - Sellos: - - Velocidad: - - Alcance y dimensiones: Cuerpo a cuerpo, el golpe causa daños en 4 metros a la redonda
Aunque algunas personas ven a esta técnica como un tipo de "fuerza sobrehumana", en realidad no es más que una aplicación del Ninjutsu médico que requiere de una gran capacidad de concentración y un minucioso control del chakra. El usuario moldea una gran cantidad de chakra en el interior de su cuerpo y después lo concentra en una de sus extremidades. Este se libera en el momento del impacto, causando un gran daño. Depende, sobre todo, de la cantidad de chakra utilizado; aunque los ninjas más experimentados son capaces de concentrar toda la energía en la yema de uno de sus dedos. Cuando el suelo se ve afectado por la técnica, este es pulverizado en pequeñas piezas que se dispersan como si de pétalos de flores se trataran, de ahí el nombre de la técnica.
—Grupo 5: Eri, Daigo, (Invierno, 220), Poder 60
—Grupo 10: Eri, Daruu y Yota, (Otoño, 220), Poder 60
—Grupo ???: Eri, Datsue, Reiji y Hanabi, (Invierno, 220), Poder 100
Esperaba pacientemente hasta que Eri saliese de su escondite. No tenía ninguna prisa, solo aquel silencio sepulcral me resultaba incómodo pero a medida que me iba alejando, dando pasos hacía atrás, iba cogiendo un poco de aire.
Mucho se estaba alargando el primer golpe que desencadenaría en una sucesión de más golpes. Al menos esperaba poder hacerle un rasguño, por pequeño que fuese, no podía irme de allí habiendo recibido todas las hostias. Eso era inaceptable. Si perdía debía ser con la cabeza bien alta y a poder ser con un poco de orgullo.
*Ahí viene*
De derás del pilar salieron 4 copias exactas directas hacía mí. Me fijé en ellas, quizás una de ellas fuese la verdadera, pero no, ninguna de ellas lo era. 4 malditos bunshins.
*¿Qué estarás tramando..?*
Entonces lo entendí, las 4 copias venían a mí con un claro propósito. Tenía la certeza de que aquella primera arremetida no era importante, no iba a recibir daños. No tardaron en alcanzarme, creando una nube de humo. Tenía que salir de ahí cuanto antes y eso fue lo que hice, dando un salto hacía atrás al mismo tiempo que encadenaba una serie de sellos y algo atravesó la nube. Un maldito shuriken que fui incapaz de esquivar y se clavó en mi torso haciendo una leve punzada de dolor. Mis manos se cargaron de chakra y pronto emitieron chispas.
*Está vez si te daré*
El shuriken debía ser el paso previo y además delataba su posición, estaba tras la cortina de humo. Si lanzaba un ataque de área la alcanzaría. Liberé el kangekiha de mis manos creando una cadena de rayos que se extendían a lo ancho en 2.5 metros, siendo la nube de humo el punto central y avanzaría otros 5 metros en línea recta, justo en el momento en el que Eri se dejaba ver tras su propia trampa.
¤ Raiton: Kangekiha ¤ Elemento Rayo: Ola de Inspiración - Tipo: Ofensivo - Rango: C - Requisitos: Raiton 10 - Gastos:
12 CK
(Raiton 20) (multiplicable x2)
(Raiton 30) (multiplicable x3)
- Daños: 20 PV - Efectos adicionales: - - Sellos: Liebre Perro → Jabalí → Buey → Rata - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones:
La ráfaga de electricidad abarca 1'5 metros y avanza 3 metros (mutiplicado x1)
La ráfaga de electricidad abarca 2'5 metros y avanza 5 metros (mutiplicado x2)
La ráfaga de electricidad abarca 4 metros y avanza 8 metros (mutiplicado x3)
El ejecutor genera desde sus manos una conjunción de descargas eléctricas que viajan e impactan al objetivo al unísono. El poder de la técnica puede variar mucho, dependiendo del chakra utilizado por el ninja. Puede utilizarse junto a técnicas Suiton para aumentar su potencia.
Ejecuto la técnica justo cuando estás atravesando la nube de humo, por lo que habiendos altado hacia atrás previamente hay una distancia de un metro aprox. y por tanto antes de que me des con el okasho te daría yo con mi técnica.
4/03/2016, 21:51 (Última modificación: 4/03/2016, 22:40 por Uzumaki Eri.)
De lleno.
Cuando cayó, exhausta por el gasto de chakra desorbitado que había empleado, no podía ni moverse, y cuando sintió que debajo de su extremidad superior izquierda no había nada más que tierra saltando por los aires cual pétalos, sabía que el ataque próximo le daría.
Y así fue.
Una cadena de rayos impactó contra su pequeño cuerpo e hizo que la kunoichi saliese despedida hacia detrás de su posición, dando una voltereta hacia atrás y que la espalda de ésta impactase contra el pilar, quedándose sentada contra él unos segundos. Sentía una corriente eléctrica recorrer su cuerpo que había paralizado su pierna derecha y sentía como si dicha pierna se hubiese sumido en un profundo sueño ya que, aunque su cerebro ordenase que se moviera, la extremidad pasaba olímpicamente de ella hasta que un cosquilleo incómodo se acomodó en aquel lugar. ''¡Despierta, estúpida!'' Eri comenzó a desesperarse, golpeando a su pierna hasta que por fin pudo incorporarse, lentamente y apoyándose completamente en el cilindro.
Buscó con sus ojos a Yota, para darse cuenta de que el shuriken de la joven había impactado completamente.
''Le ha dado... Oh... El veneno...'' Parpadeó varias veces, el veneno que había impregnado nada más comenzar la pelea en aquel arma arrojadiza había por fin impactado contra su oponente, tenía una oportunidad frente a él, ahora sí, y no podía desaprovecharla. Lo malo es que el otro shuriken, el anterior lanzado y que ahora poseía el Sasagani también tenía veneno, uno de menor potencia, pero uno al fin y al cabo.
Solo tenía que tener cuidado por si al chico se le ocurría tirar alguna de sus propias armas contra ella.
Mecanismo oculto de kunai (cargado) [En la muñeca izquierda]
Daño recibido
Kangekiha: 40PV
Daño causado
6PV/Turno por veneno común mejorado (primer turno)
¤ Veneno común mejorado - Tipo: Veneno - Requisito: Iryo-Nin o Marionetista - Precio: 800 ryos - Uso: 6 PV/turno durante 6 turnos
Existen pequeños tubos de veneno común, mas dañino ahora, que están en forma liquida pero al estallar pueden producir un gas que al ser inhalado provoca los mismos efectos que un corte con una espada envenenada.
Cuando Eri en los primeros turnos se llevaba las manos hacia detrás de su cuerpo no era más que para poner veneno en los shuriken, el veneno común y el veneno común mejorado.
—Grupo 5: Eri, Daigo, (Invierno, 220), Poder 60
—Grupo 10: Eri, Daruu y Yota, (Otoño, 220), Poder 60
—Grupo ???: Eri, Datsue, Reiji y Hanabi, (Invierno, 220), Poder 100
Era de imaginar que ante el primer golpe certero, los demás iban a sucederse uno tras otro, pero quizás no a tal velocidad. Las primeras embestidas sirvieron para medirnos, conocer nuestros puntos fuertes y débiles y una vez analizados, actuar en consecuencia, pero... ¿Quién iba a llevarse el gato al agua? Todo hacia pensar que todo iba de cara para mí. Tan solo había recibido el impacto de un inocente shuriken mientras que ella había recibido mi técnica de la cadena de rayos de lleno, saliendo despedida hacia atrás para acabar chocando su espalda contra el contundente muro de piedra.
La gente, además, estaba disfrutando con las últimas acciones y así lo hacían saber con efusivos aplausos y algún que otro "hurra".
*No es momento para dudar, es ahora o nunca*
El shuriken clavado no me impediría hacer una rápida ofensiva desde la distancia. Además la kunoichi estaba inmovil, como si no pudiese levantarse. Parecía como un regalo como caído del cielo.
*Serpiente*
Mis manos formaron el sello de la serpiente una vez más y todo el mundo sabía que era lo siguiente. Corrí un poco en dirección a la chica y abrí la boca de par en par para que una lanza de rayo se abalanzase al resentido cuerpo de la chica.
¡Una vez más*
Cuando todos pensaron que mi ofensiva había finalizado, una nueva lanza salió en dirección a la muchacha dispuesto a causar estragos hasta que...
-Ugh..-una punzada en la cabeza-¿Qué cojones me pasa..?-
De pronto es como si mi cabeza hubiese flotado durante milisegundos, acompañado de una sensación de flaqueza. Me llevé mi mano a la frente, entre algún que otro bufido. Cerré los ojos y volví al campo de batalla, tome el shuriken con la mano y vi que estaba un poco pringoso además de ofrecer un aliento poco agradable.
-¿Qué es esto..?-
Alguna había hecho Eri con el maldito shuriken, aguardaba sorpresas y mucho me temía que no iban a ser agradables, la cuestión era, ¿Qué era lo que había hecho?. Alcé la mirada para no perderla de vida, epro lo cierto es que empezaba a sentirme agotado.
¤ Raiton: Gian ¤ Elemento Rayo: Falsa Oscuridad - Tipo: Ofensivo - Rango: B - Requisitos: Raiton 20 - Gastos: 24 CK - Daños: 40 PV - Efectos adicionales:(Raiton 80) Puede ser disparado con un movimiento en zig-zag, primero hacia un flanco, y luego hacia el objetivo - Sellos: Serpiente - Velocidad: Muy rápida - Alcance y dimensiones: El rayo puede recorrer una distancia de 10 metros antes de disiparse
El usuario, tras realizar el sello correspondiente, emite electricidad en forma de lanza a través de su boca, que envía hacia su enemigo tratando de que impacte contra su cuerpo. Es una técnica con un buen poder destructivo, ya que es capaz de atravesar incluso la roca. El usuario puede lanzar otra lanza más pasados unos segundos desde el lanzamiento de la primera.
Su pierna, a causa de la ofensiva de Yota, fue la parte decisiva de aquella parte del combate, el cual ya estaba caliente, con los ánimos del público avivando la llama que hacía que su temperatura subiera por momentos.
Intentó incorporarse, ya cuando su pierna derecha había decidido responder a las súplicas que el cerebro de la peliazul emitía, pero fue tarde, muy tarde, ya que la ofensiva del Sasagani había dado de lleno en su pequeño cuerpo, haciendo a la pequeña toser debido al impacto, y que su cuerpo, de nuevo, sintió el frío del pilar en su espalda, y acabó, por enésima vez en aquel combate, sentada en el suelo.
Pero antes de morir atragantada por su propia saliva, observando como su contrincante se disponía a lanzar otra técnica contra ella, pensó rápido echando un ojo a su repertorio de técnicas ya adquiridas y por ello comenzó a realizar una serie de sellos para intentar evitar que dicha ofensiva corriese la suerte del primero, evitando así otro golpe. Además, su cuerpo estando en caliente solía soportar mejor que cuando no se lo esperaba.
Haciendo gala de lo anteriormente dicho, lo hizo.
''Dragón, tigre, liebre''
Por entre sus labios surgió una cascada de agua directa a la lanza eléctrica lanzada por la boca del pelirrojo, con toda la potencia que pudo haber creado la pequeña, intentando ganar para evitar otro golpe contra su cuerpo que ya comenzaba a debilitarse.
Mecanismo oculto de kunai (cargado) [En la muñeca izquierda]
Daño recibido
Gian: 40 PV
Daño causado
6PV/Turno por veneno común mejorado (segundo turno) + Mizurappa (multiplicado x2): 40PV
¤ Veneno común mejorado - Tipo: Veneno - Requisito: Iryo-Nin o Marionetista - Precio: 800 ryos - Uso: 6 PV/turno durante 6 turnos
Existen pequeños tubos de veneno común, mas dañino ahora, que están en forma liquida pero al estallar pueden producir un gas que al ser inhalado provoca los mismos efectos que un corte con una espada envenenada.
¤ Suiton: Mizurappa ¤ Elemento Agua: Ola de Agua Salvaje - Tipo: Ofensivo - Rango: C - Requisitos: Suiton 10 - Gastos:
12 CK
(Suiton 20) (multiplicable x2)
(Suiton 30) (multiplicable x3)
- Daños: 20 PV - Efectos adicionales:(Suiton 80) El chorro de agua puede ser lanzado de forma parabólica, aunque no alcanza el ancho de la técnica hasta que no está a 3 metros del objetivo - Sellos: Dragón → Tigre → Liebre - Velocidad: Rápida - Alcance y dimensiones:
La técnica avanza 3 metros, y goza de 1'5 metros de anchura (multiplicado x1)
La técnica avanza 8 metros, y goza de 2'5 metros de anchura (multiplicado x2)
La técnica avanza 10 metros, y goza de 4 metros de anchura (multiplicado x3)
Tras la realización de los sellos, el usuario expele agua desde su boca, como se tratase de una cascada con forma de trompeta, que arrasa con el adversario y lo derriba. El ejecutor de la técnica puede controlar su poder libremente administrando la cantidad de chakra que libera al utilizarla. Es una técnica básica de elemento agua.
—Grupo 5: Eri, Daigo, (Invierno, 220), Poder 60
—Grupo 10: Eri, Daruu y Yota, (Otoño, 220), Poder 60
—Grupo ???: Eri, Datsue, Reiji y Hanabi, (Invierno, 220), Poder 100
La primera lanza viajó a tal velocidad que la chiquilla no tuvo más remedio que encajar aquel certero y doloroso golpe, pero aún no se había rendido, hizo el esfuerzo y puso todo su esmero en erguirse y correr hacía mí, tenía algo pensado y sus manos así lo hacían saber, puesto que se enlazaron y formaron 3 sellos cuando la segunda lanza eléctrica fue creada y empezó a volar. Junté mi puño viendo como un chorro de agua viajaba y se iba amplificando creando una simbiosis entre las dos técnicas, pero para mi desgracia, a diferencia de lo que pude experimentar con Karamaru, fue esta vez mi técnica la que perdió el choque y lo que era aún peor, ambos se juntaron para ganar potencia golpeándome en la sien con la fuerza de un dragón realmente cabreado. Saltaron chispas, gotas y algún pedazo de mi propia sangre. No era consciente de si era de la nariz, del labio, quizás de algún ojo. simplemente supe que estaba volando en dirección contraria, para acabar en el suelo haciendo vueltas y mientras tanto el veneno me seguía mareando y consumiendo mi vitalidad.
Estaba tan jodidamente mal que acabé tumbado en el suelo y eran tan pocas las fuerzas que todavía residían en mi interior que las manos empezaban a flaquear, incluso con algún que otro temblor cuando traté de hacer fuerza con msi extremidades para levantarme.
-¡No!-
Tosí con violencia al mismo tiempo que golpeaba el suelo con la cabeza el suelo después de que mis flacuchos brazos se resintieran tanto que no podían sujetarme, acabando por caer en el pequeño charco de sangre que surgió tras toser. Estaba tendido sobre mi propia sangre.
*Puta mierda*
Por si todavía no tenía suficiente, los mareas cada vez eran más agudos y algo dentro de mí me decía que acabaría sacando la comida por la boca.
Qué jodidamente patético.
Sin embargo me sirvió para entenderlo definitivamente. Aquellos mareos, aquella debilidad... El shuriken de Eri había sido impregnado de veneno. De uno potente.
-¡ACABA CON ÉL DE UNA VEZ, NIÑITA!-
La gente gritó prácticamente al unísono y poco a poco todo el estadio se fue animando. sus súplicas se iban colando por entre mis oídos. No sabría decir qué eran todas aquellas sensaciones, ¿Rabia? ¿Impotencia? ¿Odio justificado? ¿Tristeza quizás? Entre toda aquella sangre alguna que otra lágrima descendió por mis mejillas mezclandose y diluyendo sobre el líquido rojizo y poco a poco mi mano se iba dirigiendo hasta el portaobjetos donde residía el otro shuriken, el que había tomado del pilar al principio de la pelea.
-Aún no he acabado, no hasta que caiga inconsciente-susurré con los dientes apretados.
Observó como el Sasagani caía al suelo, sobre su propio charco de sangre, y como diversas voces comenzaron a chillar a la joven de cabellos azules, que comenzaba a sentirse fatal por lo que estaba haciendo. ¿No debería crecerse ante tales ánimos? Si, claro, si de verdad lo fuesen, porque aquellas palabras no eran de aliento, sino de súplica por sangre, por el final de aquel combate, por acabar con Yota de una vez por todas.
''¿Por qué no se detiene...?''
No sabía ni por qué, pero ya se hallaba caminando hacia él, sin correr, pero con paso apresurado, y cuando estuvo a varios metros, corrió lo máximo que le prestaban sus piernas. De un salto, acabó encima de él, sujetándole la cabeza con la diestra y sujetando el kunai que residía en su mecanismo oculto de su brazo zurdo sobre él.
-Yota-niichan... - susurró con voz suave. -Dejémoslo ya... - pidió con voz ahogada y la zurda temblorosa, ¿cómo podría asestarle el golpe final? ¡Era de locos, por Kami-sama! ¿No se habían dado cuenta de que es alguien importante para ella? Negó repetidas veces, y, al final, dejando a su cuerpo balancearse hacia atrás, terminó impactando su propia cabeza con la del chico de cabellos rojizos, asestándole un cabezazo. Al menos era una forma nueva para ella de acabar una pelea... ¿No?
Se despegó de su contrincante poco a poco, apoyándose con ambas manos sobre su espalda, y se quedó mirando su desordenado cabello, esparciéndose por su nuca y eso la hipnotizó por completo, ya ni escuchaba los gritos del público, solo... Quería que aquel día acabase cuanto antes.
Mecanismo oculto de kunai (cargado) [En la muñeca izquierda]
Daño recibido
Daño causado
6PV/Turno por veneno común mejorado (Tercer turno) + Cabezazo = 13PV(12 + 3 mi fuerza - 2 tu resistencia)
¤ Veneno común mejorado - Tipo: Veneno - Requisito: Iryo-Nin o Marionetista - Precio: 800 ryos - Uso: 6 PV/turno durante 6 turnos
Existen pequeños tubos de veneno común, mas dañino ahora, que están en forma liquida pero al estallar pueden producir un gas que al ser inhalado provoca los mismos efectos que un corte con una espada envenenada.
—Grupo 5: Eri, Daigo, (Invierno, 220), Poder 60
—Grupo 10: Eri, Daruu y Yota, (Otoño, 220), Poder 60
—Grupo ???: Eri, Datsue, Reiji y Hanabi, (Invierno, 220), Poder 100
11/03/2016, 12:56 (Última modificación: 11/03/2016, 13:06 por Sasagani Yota.)
Escuchaba sus pasos como si fueran los de un gigante, retumbaban en mi cabeza que cada vez estaba más mareada y más confusa. en las gradas ya no habían personas, sino manchas y me sentía incapaz de levantarme, solo quería que aquel malestar cesase de una puta vez, no pedía tanto.
Pero Eri quería dar por zanjada aquella disputa, haciendo caso a la voluntad de la plebe de un solo salto se puso encima mío agarrándome de la cogotera.
-Ugh..-
Sentía que su zurda, con el kunai desplegado temblaba. No se atrevía a acabar el combate. Después de todo lo sucedido, ¿Qué se lo impedía? La mente humana era un artilugío por investigar, desde luego.
-Yota-niichan... - susurró con voz suave. -Dejémoslo ya...
-Esto no se acaba hasta que uno de los dos cae derrotado al suelo-me aclaré la garganta como buenamente pude-Lo ha dicho tu sensei-
Sí, eso es. Debíamos partirnos la cara como si no hubiera un mañana. Hasta entonces todo había ido a pedir de boca para los espectadores, pero deseaban verme caer. No iba a irme de rositas. Con el shuriken agarrado entre mis dedos se lo clavé en su pierna antes de que me diese un cabezazo con el que acabaría perdiendo el sentido común y la conciencia.
Todo se volvió negro y mi cabeza se apagó.
No así entre el público, que había estallado en una ovación hacía la peli azul. De hecho todos coreaban su nombre al mismo tiempo que unos aplaudían, otros sílbaban. En fin, cada uno hacia lo que buenamente podía y estaban encantados de conocer ya, por fín la primera finalista de la gran final de aquel torneo. ¿Sería capaz de coronarse campeona?
11/03/2016, 13:18 (Última modificación: 11/03/2016, 13:33 por Uzumaki Eri.)
-No podía irme sin recibir el veneno de la araña, no, ¿Yota? - Susurró cuando sintió su propia sangre recorrer su pierna con el shuriken impregnado en veneno que el pelirrojo se había agenciado desde los primeros momentos, sin embargo no recibiría respuesta, el Sasagani había caído inconsciente.
Era un hecho que había pasado a la final.
Había recibido veneno, sí, y notaba como recorría su cuerpo, lentamente, pero podría con ello, al menos hasta llegar al hospital. Un corto mareo se apoderó de su cabeza, haciendo que, mientras se levantaba, se llevase su mano izquierda al ojo, - la cual ya había guardado el kunai en su mecanismo oculto de nuevo y el clavado en su portaobjetos - intentando en vano frenar aquel mareo.
A pasos cortos y torpes, incluso a tropezándose varias veces sin caer; sin escuchar su nombre, los alagos, o incluso haberse proclamado vencedora; se alejó del lugar lentamente, ni una reverencia dio, solo buscaba desaparecer de aquel lugar cuanto antes.
Ya se enteraría de quién sería el otro o la otra finalista, pero por ahora, solo quería dormir durante la semana que separaba las semifinales de la final.
La tan esperada final.
—Grupo 5: Eri, Daigo, (Invierno, 220), Poder 60
—Grupo 10: Eri, Daruu y Yota, (Otoño, 220), Poder 60
—Grupo ???: Eri, Datsue, Reiji y Hanabi, (Invierno, 220), Poder 100