6/05/2016, 00:32
(Última modificación: 6/05/2016, 00:32 por Amedama Daruu.)
Los muchachos comenzaron a caminar, y pronto sus pies habían dejado atrás los cadáveres. Con ellos, una parte del peso que sentía en el pecho se había quedado allí. Pero siempre les acompañaría un gran pedazo. Daruu suponía, que como con todo, aquél pedazo se haría más y más pequeño a medida que pasara el tiempo. Pero intuía, también, que nunca llegaría a desaparecer. Sobre lo otro...
Sobre lo otro, era mejor dejar de pensar en ello por ahora.
—Has oído lo de Yui-sama, ¿verdad? —le dijo Ayame, bajando la voz.
—Es mejor que no hablemos de eso —Daruu apretó los puños—. Aún no puedo creerme lo que pasó con Kusagakure. Y prefiero no pensar en ello. Me hace más fácil seguir órdenes.
Claro que lo había oído. ¿Cómo no lo iba a oír? La misma Yui en persona les había contado todo. Usar de aquella manera a Ayame sin su consentimiento... Lo peor, es que Zetsuo, su propio padre, lo había permitido. Pero...
—¿...de todas formas, a quién pretendo engañar? ¿Habríamos podido hacer algo? ¿Alguno de nosotros? Somos peones. Arenilla al lado de montañas. No estamos en las altas esferas. Ni estamos... ni se nos espera.
»¿Te apetece cenar conmigo? —soltó, cambiando de tema tan rápido como habían huído del lugar.
Era extraño. Acababan de matar a varias personas, y estaba invitando a cenar a una chica. Se encogió de hombros al pensarlo, pese a que debía resultar estúpido que se encogiera de hombros sin contexto, como dialogando mentalmente consigo mismo.
¿Qué otra cosa podían hacer? Como con lo de Kusagakure, lo mejor era mirar hacia delante y dejar lo pesaroso atrás.
Había que hacer pequeño el pedazo de mal recuerdo que les acompañaba.
Sobre lo otro, era mejor dejar de pensar en ello por ahora.
—Has oído lo de Yui-sama, ¿verdad? —le dijo Ayame, bajando la voz.
—Es mejor que no hablemos de eso —Daruu apretó los puños—. Aún no puedo creerme lo que pasó con Kusagakure. Y prefiero no pensar en ello. Me hace más fácil seguir órdenes.
Claro que lo había oído. ¿Cómo no lo iba a oír? La misma Yui en persona les había contado todo. Usar de aquella manera a Ayame sin su consentimiento... Lo peor, es que Zetsuo, su propio padre, lo había permitido. Pero...
—¿...de todas formas, a quién pretendo engañar? ¿Habríamos podido hacer algo? ¿Alguno de nosotros? Somos peones. Arenilla al lado de montañas. No estamos en las altas esferas. Ni estamos... ni se nos espera.
»¿Te apetece cenar conmigo? —soltó, cambiando de tema tan rápido como habían huído del lugar.
Era extraño. Acababan de matar a varias personas, y estaba invitando a cenar a una chica. Se encogió de hombros al pensarlo, pese a que debía resultar estúpido que se encogiera de hombros sin contexto, como dialogando mentalmente consigo mismo.
¿Qué otra cosa podían hacer? Como con lo de Kusagakure, lo mejor era mirar hacia delante y dejar lo pesaroso atrás.
Había que hacer pequeño el pedazo de mal recuerdo que les acompañaba.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)