2/08/2016, 20:33
Parecía que todo estaban de acuerdo en lo que pensaban, que el pueblo ese era rarisimo y que algo estaba sucediendo y que había que terminar la misión. A fin de cuentas, la única cabra que habían visto era la que estaba en el cuadro ese dentro de la casa que estaba abandonada y al único ser capaz de tener la inteligencia capaz de hablar el mismo idioma que ellos se había esfumado en la niebla misma.
Si tan solo esta niebla no estuviese... aunque... Katomi sabe técnicas de fuego...
Con la niebla presente sería eterna la búsqueda, pero al joven médico no se le habían olvidado las habilidades de la Sarutobi. De todas formas se guardó sus pensamientos, en una misión de rango tan bajo no se suponía que fuese necesario el uso de técnicas de combate.
Peinar el pueblo entero puede tomar mas tiempo que abrir esa puerta... Si eso que acaba de "advertirnos" realmente no quiere que abramos la puerta vendrá a "impedirlo"...
Volvería su mirada hacía la puerta, junto al dedo acusador de la kunoichi de melena blanca. Miró unos segundos directo a los ojos de la muchacha.
Si no hay nada útil dentro de ese lugar, te ayudaré a sacar esta niebla del camino.
Era algo de lo que podía ser capaz, si juntaban sus elementos como lo habían llegado a hacer tiempo atrás el trabajo sería hecho el doble de rápido y de esa forma tardarían mucho menos. El planteo de Mogura era sencillo, abrir la puerta y después buscar al tipejo fantasmagórico.
Si nadie lo impedía, el joven Manase avanzaría nuevamente hasta la puerta, y sin golpear esta vez intentaría empujar las hojas de la gran entrada con la intención de abrirlas.
Si tan solo esta niebla no estuviese... aunque... Katomi sabe técnicas de fuego...
Con la niebla presente sería eterna la búsqueda, pero al joven médico no se le habían olvidado las habilidades de la Sarutobi. De todas formas se guardó sus pensamientos, en una misión de rango tan bajo no se suponía que fuese necesario el uso de técnicas de combate.
Peinar el pueblo entero puede tomar mas tiempo que abrir esa puerta... Si eso que acaba de "advertirnos" realmente no quiere que abramos la puerta vendrá a "impedirlo"...
Volvería su mirada hacía la puerta, junto al dedo acusador de la kunoichi de melena blanca. Miró unos segundos directo a los ojos de la muchacha.
Si no hay nada útil dentro de ese lugar, te ayudaré a sacar esta niebla del camino.
Era algo de lo que podía ser capaz, si juntaban sus elementos como lo habían llegado a hacer tiempo atrás el trabajo sería hecho el doble de rápido y de esa forma tardarían mucho menos. El planteo de Mogura era sencillo, abrir la puerta y después buscar al tipejo fantasmagórico.
Si nadie lo impedía, el joven Manase avanzaría nuevamente hasta la puerta, y sin golpear esta vez intentaría empujar las hojas de la gran entrada con la intención de abrirlas.