23/05/2015, 18:54
El moreno procedió a tomar asiento como ya habian hecho los otros dos, y sentados empezaron a hablar comodamente sobre la vida y otros temas de clara trascendencia universal. Aprovechó para examinar a los que serian sus compañeros, un marionetista y un espadachín. Pelinegro y peliblanco, de ojos de un marron bastante más claro que el de Nabi y de ojos gris claro que recordaba a aquellas acumulaciones gaseosas del cielo en tempesad.
Como era de esperar, Kulo era el más escualido y el más bajito de ellos, aunque fuera por poco, pero vamos, era un ejemplo del estereotipo de marionetista. Seguramente fuera agil y con un control del chakra sin igual. Kazuma, por su lado, era el más fuerte y alto de ahí, a pesar de ser el de menor edad. Con su fiel espada al lado, seguramente en un combate de Kenjutsu no tendria rivales entre los novatos. Y despues estaba Nabi, que era el mediocre del grupo, más fuerte que el moreno y menos que el peliblanco, en cuanto a altura, casi alcanzaba al Ishimura, pero este le ganaba por milimetros.
Volviendo de nuevo a las conversaciones, lo primero que salió de la boca de su querido amigo peliblanco fue "Buenos dias, Nana". A veces pensaba que no lo odiaba, pero entonces soltaba esas cosas crueles y se le pasaba. Despues se refirió a su descortesia con Kulo. Ahí ya fue cuando el rubio se perdio. ¿Era por qué no se habia presentado?
Pero ¿por que me llamas así? Me dejas en evidencia delante de nuestro niño.
Con todo el dramatismo que era capaz de poner en una oración. Entonces Kulo comentó fugazmente que en realidad se llamaba Juro, Eikyu Juro.
Oh... A eso se referia Kazuma con lo de descortesia. Perdona, por algún motivo estaba convencido de que te llamabas Kulo. Y no, no me llamo Nana. Eso es una invención del gran y magnanimo Ishimaru Kazuma para vacilarme y hacerme sentir inferior.
Pero que el muchacho seguia sin presentarse. O tal vez, estaba esperando el momento adecuado. No, en realidad no se habia dado cuenta de que Juro no sabia como se llamaba. Es decir, ¿quien podia ir a la academia durante varios años y no saber quien es Nabi Nabi, el magnifico? No era algo comprensible.
Desde lo más profundo de mi corazón os voy a decir algo. Yo si fuera a ser sensei de un equipo de novatos como nosotros me ocultaria en el aula para ver como se comportan esos simios en su habitat natural antes de presentarme oficialmente. Así que vamos al grano. ¿Creeis que nuestro sensei sera Takomato-sensei? O peor, ¿Shimoru-sensei? Espero que directamente no sea ninguno de la academia.
Habia nombrado a su maestro de clase, que era un Jonin que algo tenia que haber hecho para acabar de tutor y al profesor de Taijutsu, que no tenia ni idea de su rango, porque todo en él, era un misterio. Realmente esperaba no tener que volver a verlos. El marionetista tuvo la osadia de fruncir el ceño ante lo de invocar dragones.
¿No te gustan los dragones, Jurete? Siempre te quedaran los unicornios.
El tono esta vez era uno más alegre sin mala intención ni bromista. Eso le desconcertaria aún más.
Como era de esperar, Kulo era el más escualido y el más bajito de ellos, aunque fuera por poco, pero vamos, era un ejemplo del estereotipo de marionetista. Seguramente fuera agil y con un control del chakra sin igual. Kazuma, por su lado, era el más fuerte y alto de ahí, a pesar de ser el de menor edad. Con su fiel espada al lado, seguramente en un combate de Kenjutsu no tendria rivales entre los novatos. Y despues estaba Nabi, que era el mediocre del grupo, más fuerte que el moreno y menos que el peliblanco, en cuanto a altura, casi alcanzaba al Ishimura, pero este le ganaba por milimetros.
Volviendo de nuevo a las conversaciones, lo primero que salió de la boca de su querido amigo peliblanco fue "Buenos dias, Nana". A veces pensaba que no lo odiaba, pero entonces soltaba esas cosas crueles y se le pasaba. Despues se refirió a su descortesia con Kulo. Ahí ya fue cuando el rubio se perdio. ¿Era por qué no se habia presentado?
Pero ¿por que me llamas así? Me dejas en evidencia delante de nuestro niño.
Con todo el dramatismo que era capaz de poner en una oración. Entonces Kulo comentó fugazmente que en realidad se llamaba Juro, Eikyu Juro.
Oh... A eso se referia Kazuma con lo de descortesia. Perdona, por algún motivo estaba convencido de que te llamabas Kulo. Y no, no me llamo Nana. Eso es una invención del gran y magnanimo Ishimaru Kazuma para vacilarme y hacerme sentir inferior.
Pero que el muchacho seguia sin presentarse. O tal vez, estaba esperando el momento adecuado. No, en realidad no se habia dado cuenta de que Juro no sabia como se llamaba. Es decir, ¿quien podia ir a la academia durante varios años y no saber quien es Nabi Nabi, el magnifico? No era algo comprensible.
Desde lo más profundo de mi corazón os voy a decir algo. Yo si fuera a ser sensei de un equipo de novatos como nosotros me ocultaria en el aula para ver como se comportan esos simios en su habitat natural antes de presentarme oficialmente. Así que vamos al grano. ¿Creeis que nuestro sensei sera Takomato-sensei? O peor, ¿Shimoru-sensei? Espero que directamente no sea ninguno de la academia.
Habia nombrado a su maestro de clase, que era un Jonin que algo tenia que haber hecho para acabar de tutor y al profesor de Taijutsu, que no tenia ni idea de su rango, porque todo en él, era un misterio. Realmente esperaba no tener que volver a verlos. El marionetista tuvo la osadia de fruncir el ceño ante lo de invocar dragones.
¿No te gustan los dragones, Jurete? Siempre te quedaran los unicornios.
El tono esta vez era uno más alegre sin mala intención ni bromista. Eso le desconcertaria aún más.
—Nabi—