25/09/2016, 23:45
Claramente era el Uchiha, como olvidarse de esa cara y ese moño en el pelo. Aunque si había algo inolvidable en ese shinobi era su mirada, negra, profunda y con secretos para revelar. Tal vez algún el calvo los conociese, tal vez algún día. Pero Karamaru se sintió extrañado por la amable y simpática reacción del de Taki al verlo, era difícil creer que lo recordase de tan buena manera, pero no era algo para quejarse, el monje no podía estar más feliz de contar con un amigo en tierras lejanas.
¡Mi incondicional amigo!
¡Mucho tiempo sin verte Datsue!
Un abrazo caluroso le dio la bienvenida al edificio y el pelado no pudo evitar sonreír y devolverlo aún con más fuerza.
¡Maldita sea! Como sigas dopándote de esta manera la próxima vez ni podré abrazarte. ¡Estás hecho un armario!
Si, me mantengo en forma.- le respondió entre risas.
Karamaru estaba por proseguir con la conversación, quería conocer que era del que antaño fue un compañero de aventuras, pero una voz hizo acto de presencia desde la espalda del morocho. Mismo color de pelo, mismo color de ojos. Ojos negro azabache, profundos e intrigantes.
Buenas tardes, shinobi-kun. Uchiha Akame, un gusto
Soy compañero de Aldea, y de aventuras, de Datsue-kun. Te recomiendo probar el té, está poco amargo y muy caliente, perfecto para soltarse la humedad de esta niebla tan fría.
"Uchiha. ¿Será por eso que son parecidos?"
El gusto es mio Akame- tendió su mano y apretó la del Uchiha.
Soy Karamaru del clan Habaki de Amegakure. Y por nada en el mundo rechazaría un té, soy casi fanático a ellos.
Karamaru rió y Datsue intervenía en la presentación. Se estaba dando un ambiente de camaradería que el monje ya estaba extrañando mucho.
¡Bah! Para alguien de Ame esto debe ser como una tarde de primavera en Takigakure.
¡El mejor shinobi que tuve a mi lado en una misión, ya lo creo que sí!
"He entrenado en condiciones peores, eso es verdad"
Lo mismo digo, todavía sigo pensando en varias cosas de aquellos días en el pueblo.
"Tranquilo Kazuma, lo tuyo no fue una misión."
Con la máxima amabilidad posible el Uchiha procedió a invitar tragos para la muchachada pero el calvo no podía permitir eso, era generoso pero no quería causar molestias en otras personas. Que Akame hiciese lo que quisiese pero Karamaru no se quedaría callado. Se acercó a Datsue y le tomó el hombro.
Dejame pagar lo mío, por favor. Me sentiría más cómodo así, si no te es problema claro esta.
Se acercó a la barra y se sentó a la derecha del puesto que ocupaba Akame y pidió un té al camarero. Dirigió la mirada a los Uchiha y volvió a usar a la voz.
Vine a visitar a un viejo amigo- respondía a una pregunta que nunca se había formulado- ¿Que los trajo hasta la frontera?
¡Mi incondicional amigo!
¡Mucho tiempo sin verte Datsue!
Un abrazo caluroso le dio la bienvenida al edificio y el pelado no pudo evitar sonreír y devolverlo aún con más fuerza.
¡Maldita sea! Como sigas dopándote de esta manera la próxima vez ni podré abrazarte. ¡Estás hecho un armario!
Si, me mantengo en forma.- le respondió entre risas.
Karamaru estaba por proseguir con la conversación, quería conocer que era del que antaño fue un compañero de aventuras, pero una voz hizo acto de presencia desde la espalda del morocho. Mismo color de pelo, mismo color de ojos. Ojos negro azabache, profundos e intrigantes.
Buenas tardes, shinobi-kun. Uchiha Akame, un gusto
Soy compañero de Aldea, y de aventuras, de Datsue-kun. Te recomiendo probar el té, está poco amargo y muy caliente, perfecto para soltarse la humedad de esta niebla tan fría.
"Uchiha. ¿Será por eso que son parecidos?"
El gusto es mio Akame- tendió su mano y apretó la del Uchiha.
Soy Karamaru del clan Habaki de Amegakure. Y por nada en el mundo rechazaría un té, soy casi fanático a ellos.
Karamaru rió y Datsue intervenía en la presentación. Se estaba dando un ambiente de camaradería que el monje ya estaba extrañando mucho.
¡Bah! Para alguien de Ame esto debe ser como una tarde de primavera en Takigakure.
¡El mejor shinobi que tuve a mi lado en una misión, ya lo creo que sí!
"He entrenado en condiciones peores, eso es verdad"
Lo mismo digo, todavía sigo pensando en varias cosas de aquellos días en el pueblo.
"Tranquilo Kazuma, lo tuyo no fue una misión."
Con la máxima amabilidad posible el Uchiha procedió a invitar tragos para la muchachada pero el calvo no podía permitir eso, era generoso pero no quería causar molestias en otras personas. Que Akame hiciese lo que quisiese pero Karamaru no se quedaría callado. Se acercó a Datsue y le tomó el hombro.
Dejame pagar lo mío, por favor. Me sentiría más cómodo así, si no te es problema claro esta.
Se acercó a la barra y se sentó a la derecha del puesto que ocupaba Akame y pidió un té al camarero. Dirigió la mirada a los Uchiha y volvió a usar a la voz.
Vine a visitar a un viejo amigo- respondía a una pregunta que nunca se había formulado- ¿Que los trajo hasta la frontera?
"El miedo es el camino al lado oscuro. El miedo lleva a la ira, la ira al odio, el odio al sufrimiento, y el sufrimiento al lado oscuro"
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘
-Maestro Yoda.
◘ Hablo ◘ Pienso ◘