27/09/2016, 20:31
(Última modificación: 27/09/2016, 20:32 por Amedama Daruu.)
—Esperad —advirtió Yubiwa, antes de que los genin saliesen por la puerta—. Esperad. Es demasiado básico.
El líder les hizo volver a entrar, y les mostró la palma de la mano mientras con la otra se acariciaba la barbilla durante un largo lapso de tiempo, reflexionando. Sus párpados, entrecerrados, dejaron ver aquellas dos anillas doradas y se clavaron en Akame.
—Te he estado observando, Uchiha Akame. Eres bueno disimulando tu disconformidad, diligente y muy obediente. Eres discreto y sutil. Se te ve de los que son capaces de mantener mentiras, y gordas. Raramente te pones nervioso, y raramente se te nota. No es tu pulso, porque te mantienes firme. Apenas sudas cuando te dicen algo que no te gusta. Pero esa mirada...
(percepción alta vs voluntad media-baja)
—Para mantener una fachada primero te la tienes que creer. Y tú no te la crees. Lo acepto, de verdad, no me molesta. Ahora que lo pienso... Puede que estas excusas sean demasiado burdas. De modo que...
»Contemos una media verdad.
Yubiwa suspiró.
—Iréis en busca de información sobre el grupo. No le digáis a nadie de donde habéis sacado esa información. Es evidente que soy yo, pero es que quiero que se note. No os haréis pasar por nadie. Seréis vosotros mismos. A vuestra edad dudo que sepáis mentir tan bien como para aguantar una fachada tan frágil como el cristal.
»Supongo que tras hacer muchas averiguaciones, tarde o temprano darán con vosotros. Lo que pase después y la excusa que daréis para que confíen en vosotros y no os maten... Es otro cantar. ¿Se os ocurre algo? ¿Akame? Siempre has sido muy suspicaz.
El líder les hizo volver a entrar, y les mostró la palma de la mano mientras con la otra se acariciaba la barbilla durante un largo lapso de tiempo, reflexionando. Sus párpados, entrecerrados, dejaron ver aquellas dos anillas doradas y se clavaron en Akame.
—Te he estado observando, Uchiha Akame. Eres bueno disimulando tu disconformidad, diligente y muy obediente. Eres discreto y sutil. Se te ve de los que son capaces de mantener mentiras, y gordas. Raramente te pones nervioso, y raramente se te nota. No es tu pulso, porque te mantienes firme. Apenas sudas cuando te dicen algo que no te gusta. Pero esa mirada...
(percepción alta vs voluntad media-baja)
—Para mantener una fachada primero te la tienes que creer. Y tú no te la crees. Lo acepto, de verdad, no me molesta. Ahora que lo pienso... Puede que estas excusas sean demasiado burdas. De modo que...
»Contemos una media verdad.
Yubiwa suspiró.
—Iréis en busca de información sobre el grupo. No le digáis a nadie de donde habéis sacado esa información. Es evidente que soy yo, pero es que quiero que se note. No os haréis pasar por nadie. Seréis vosotros mismos. A vuestra edad dudo que sepáis mentir tan bien como para aguantar una fachada tan frágil como el cristal.
»Supongo que tras hacer muchas averiguaciones, tarde o temprano darán con vosotros. Lo que pase después y la excusa que daréis para que confíen en vosotros y no os maten... Es otro cantar. ¿Se os ocurre algo? ¿Akame? Siempre has sido muy suspicaz.