15/10/2016, 00:26
Daruu flexionó ligeramente las rodillas, y todos los músculos de Ayame se pusieron en tensión en respuesta. Sin embargo, ninguno de los dos se movió aún: ni Daruu se abalanzó sobre ella, ni Ayame apartó la mano del portaobjetos. De hecho, al cabo de algunos segundos, fue él quien volvió a hablar.
—Me da igual lo que piensen nuestros padres —dijo, y Ayame no pudo evitar ladear ligeramente la cabeza—. Para mí esto no es una apuesta, porque yo no he puesto dinero. Esto es un duelo tradicional. Así que, Ayame...
Daruu relajó la postura y, para sobresalto de Ayame, estiró los dedos índice y corazón frente a sí mismo. Era el sello del tigre. El sello de la confrontación.
«¡Estúpida!» Se riñó a sí misma, obligándose a responder a aquel signo de cordialidad y respeto entre dos ninjas compañeros de aldea. ¡Con los nervios de aquella estúpida apuesta entre sus padres había olvidado los modales!
—Vamos a disfrutar del combate.
Ayame dejó escapar un ligero suspiro y sonrió a su vez.
—Daré todo de mí. Espero que tú no te contengas, Daruu.
Se permitió dirigir una última mirada a Kōri y otra de reojo a su padre. Por mucho que ella no hubiese puesto dinero en aquella prueba, sentía una gran presión de pensar que ellos estaban allí, evaluando cada uno de sus movimientos. Sacudió la cabeza por última vez, tratando de despejarse, y volvió a clavar sus ojos avellana en su oponente. No sabía mucho sobre él, y desde que combatieron por primera y última vez había pasado mucho, mucho tiempo. Ni siquiera le había visto luchar en el torneo, así que era más que previsible que guardara más de una sorpresa desagradable para ella.
«Madera y Suiton... Pero yo también tengo mis ases en la manga... Y pienso utilizarlos.»
El viento levantó una ola mal avenida que se estrelló contra la plataforma, salpicando a los dos contrincantes...
Era el gong de salida.
• PV:–
• CK:– –
Objetos: Bomba de luz, Hilo shinobi (3 usos), Kunai, Shuriken x5
Daño recibido
Daño causado
Técnicas utilizadas
—Me da igual lo que piensen nuestros padres —dijo, y Ayame no pudo evitar ladear ligeramente la cabeza—. Para mí esto no es una apuesta, porque yo no he puesto dinero. Esto es un duelo tradicional. Así que, Ayame...
Daruu relajó la postura y, para sobresalto de Ayame, estiró los dedos índice y corazón frente a sí mismo. Era el sello del tigre. El sello de la confrontación.
«¡Estúpida!» Se riñó a sí misma, obligándose a responder a aquel signo de cordialidad y respeto entre dos ninjas compañeros de aldea. ¡Con los nervios de aquella estúpida apuesta entre sus padres había olvidado los modales!
—Vamos a disfrutar del combate.
Ayame dejó escapar un ligero suspiro y sonrió a su vez.
—Daré todo de mí. Espero que tú no te contengas, Daruu.
Se permitió dirigir una última mirada a Kōri y otra de reojo a su padre. Por mucho que ella no hubiese puesto dinero en aquella prueba, sentía una gran presión de pensar que ellos estaban allí, evaluando cada uno de sus movimientos. Sacudió la cabeza por última vez, tratando de despejarse, y volvió a clavar sus ojos avellana en su oponente. No sabía mucho sobre él, y desde que combatieron por primera y última vez había pasado mucho, mucho tiempo. Ni siquiera le había visto luchar en el torneo, así que era más que previsible que guardara más de una sorpresa desagradable para ella.
«Madera y Suiton... Pero yo también tengo mis ases en la manga... Y pienso utilizarlos.»
El viento levantó una ola mal avenida que se estrelló contra la plataforma, salpicando a los dos contrincantes...
Era el gong de salida.
Estado de Ayame
• PV:
165/165
• CK:
185/185
100/100
Objetos: Bomba de luz, Hilo shinobi (3 usos), Kunai, Shuriken x5
Daño recibido