2/06/2015, 15:51
Juro y su maldita agilidad se adelantó al contraataque de Nabi. Dio media vuelta alrededor del rubio buscando su espalda, sin embargo, no contó con que el impulso que llevaba el Nabi con su patada le facilitó girarse a la vez que el moreno. Sin cambiar su posición de defensa para bloquear el golpe del marionetista. Y se fue corriendo, bueno, pues nada, se quedaria de nuevo esperando a que se le ocurriera atacar de nuevo.
De repente, y sin venir a cuento, un shuriken se cruzó por delante de Nabi para clavarse justo en el suelo que habia entre sus pies. Miró al shuriken, miró a Juro, miró a Kazuma y finalmente, dirigió su mirada a Shiori, que tenia la mano en la cara y se masajeaba las sienes con el pulgar y el indice. Parecia bastante molesta. El moreno saltó con una contestación más macarra que otra cosa, soltandole un ¿Que haces? con el tono más crudo que podia poner al pobre Kazuma. Sin embargo, era visible que seguia en tensión pues no sabia si el combate habia acabado, así que Nabi tampoco bajo la guardia.
Poco sirvió eso para lo que paso a continuación. Una sombra, más bien un violento vendaval invisible, agarró a Kazuma por el cuello de la camiseta y este se vio lanzado violentamente contra la pared, lo mismo paso con Juro, por muy atentos que estuvieran y aunque la vieran venir, no la podian parar. Nabi relajó la postura antes de que tambien se viera arrastrado por aquella fuerza contra la pared. Ahora los tres genin estaban sentados en el suelo y frente a ellos se alzaba aquella mujer de temperamento un tanto peculiar.
La pared habia permanecido inamovible, así que la hostia que se habia llevado en la espalda junto a la del estomago anterior, hacian que no supiera si doblarse hacia delante o hacia detras.
Sois lo peor que me he echado a la cara. Careceis casi totalmente de la capacidad de trabajo en equipo, ni siquiera podeis soportaros.
Tú, Nabi Nabi, te dedicas a reirte de ellos y de todo en general, lo único que te tomas en serio es pelear, y dudo que hubieras aguantado mucho sin decir una tonteria. A lo mejor no me has entendido o no me he dado a entender, pero a mi no me hace ni puta gracia, ni tus chistes, ni tus sarcasmos, ni tus puyas. Y cuando te dije que no te iba a pasar ni una, significaba que cada vez que abras la boca te la cerraré.
Eikyu Juro, has hecho más que evidente tu desagrado hacia Nabi, a ver si se os mete en la cabeza que de aqui en adelante, sois un equipo. Cuando esteis ahi fuera, vosotros os cubrireis las espaldas, dependeras de esa persona que tanto te disgusta, y si empezais a enfrentaros entre vosotros, esas rencillas no os traeran más que problemas.
Ishimura Kazuma, te he dado una orden directa, no me importa que tengas conflictos morales con ella, me da igual que en su momento te haya parecido algo malo o algo bueno. No he pedido tu opinión al respecto, te he dicho que lo hagas, y me has tomado el pelo. Ha sido un lanzamiento muy bonito, pero has incumplido mi orden.
Mirad, me han dado el trabajo de hacer de tres ninjas que se creen muy increibles y muy buenos un equipo, pero eso no va siquiera a empezar hasta que no me mostreis un minimo. Y mi minimo es que obedezcais todo cuanto os diga, y si os digo que mateis a uno del equipo, lo haceis, porque yo soy cien veces más experimentada que vosotros y sé lo que hago, vosotros no teneis ni idea de lo que haceis. Sin replicas, sin preguntas, sin vacilar, sin pensar.
Hoy me he controlado porque era nuestra primera reunion. Solo queria ver vuestras bases. Hasta aqui han llegado las pruebas por hoy. Si teneis algo que decir lo podeis decir ahora.
Les habia caido la bronca, al acabar su cara paso a una seria pero más tranquila que antes. Aunque se crujia los nudillos en el silencio que habia inundado tras que finalizara su sermón. Nabi dio una ojeada a sus compañeros y ninguno parecia tener los ovarios de decirle algo a la pelirroja. Decidió romper el hielo.
¿Cuando volveremos a reunirnos, Shiori-sensei?
Mañana, la semana que viene, dentro de un mes. Yo de vosotros no haria planes, ya os avisaré.
Despues ambos guardaron silencio expectantes de lo que los otros dos genins tuvieran que decir.
—Nabi—