19/04/2017, 21:30
Ante la exclamación afirmativa la kunoichi no dudó en sonreír, preparándose al igual que su compañero de villa para comenzar a correr un rato y entrar en calor. Su mochila —más pequeña que la de Akame— estaba bien asegurada en su espalda, y tras ajustar un poco sus sandalias ya se encontraba lista.
Lo peor de aquello fue, sin lugar a dudas, seguir el ritmo de Akame, y no es que fuese porque él corriese más, no; era porque sus piernas eran más cortas que las de él, así que tenía que dar dos pasos para igualar uno del Uchiha. Y eso fue en lo que más se concentró ella, intentar igualar su posición hasta que subió el ritmo.
Su respiración comenzó a ser más agitada y la mochila a la espalda dando a veces contra esa parte de su cuerpo no favorecía la carrera, sin embargo, el Uchiha se paró en un lado del camino, tosiendo. Lo más probable es que se hubiese cansado. Y estaba en lo correcto, su mochila resultaba ser una gran carga así que lo mejor, según lo que proponía el chico, era minimizar los descansos.
Al pensar en aquello no pudo evitar reparar en su respiración entrecortada y en sus piernas un poco doloridas, y se sintió mal por un momento, pensado que, quizás, no había sido buena idea.
— Lo siento Akame-san, quizá no fue buena idea. — Puso voz a sus pensamientos con voz apenada mientras desviaba la vista al suelo. — Sí, mejor minimicemos los descansos. — Afirmó mientras se acercaba a él y le daba un suave toque en el hombro. — Sigamos ahora más tranquilos.
»¿O quieres que te lleve la mochila?
Su última pregunta fue de broma, intentando aliviar el ambiente mientras arqueaba una ceja, luego comenzó a andar a ritmo normal, esperando que Akame no tardase mucho en recomponerse.
Lo peor de aquello fue, sin lugar a dudas, seguir el ritmo de Akame, y no es que fuese porque él corriese más, no; era porque sus piernas eran más cortas que las de él, así que tenía que dar dos pasos para igualar uno del Uchiha. Y eso fue en lo que más se concentró ella, intentar igualar su posición hasta que subió el ritmo.
Su respiración comenzó a ser más agitada y la mochila a la espalda dando a veces contra esa parte de su cuerpo no favorecía la carrera, sin embargo, el Uchiha se paró en un lado del camino, tosiendo. Lo más probable es que se hubiese cansado. Y estaba en lo correcto, su mochila resultaba ser una gran carga así que lo mejor, según lo que proponía el chico, era minimizar los descansos.
Al pensar en aquello no pudo evitar reparar en su respiración entrecortada y en sus piernas un poco doloridas, y se sintió mal por un momento, pensado que, quizás, no había sido buena idea.
— Lo siento Akame-san, quizá no fue buena idea. — Puso voz a sus pensamientos con voz apenada mientras desviaba la vista al suelo. — Sí, mejor minimicemos los descansos. — Afirmó mientras se acercaba a él y le daba un suave toque en el hombro. — Sigamos ahora más tranquilos.
»¿O quieres que te lleve la mochila?
Su última pregunta fue de broma, intentando aliviar el ambiente mientras arqueaba una ceja, luego comenzó a andar a ritmo normal, esperando que Akame no tardase mucho en recomponerse.