5/05/2017, 20:15
(Última modificación: 5/05/2017, 20:19 por Uchiha Datsue.)
—¿En serio? ¿Qué celebramos? ¿El éxito de nuestra misión?
Haskoz no pudo evitar soltar una carcajada ante el comentario. ¿Qué iba a hacer sino? Era eso o ponerse a llorar por el ridículo de encargo que le habían mandado hacer, y ya se había lamentado lo suficiente a lo largo del día.
—No se bebe para celebrar, Akame-kun. Se bebe para olvidar.
Lo sabía. Sabía que tendría que derramar sangre y sudor para convencer a Akame, el alumno modélico de la Academia, de acercar siquiera sus labios a aquella bebida alcohólica. Pero sabían los Dioses que había venido preparado. En su mente, todo un arsenal de réplicas y contra-réplicas a las posibles excusas que Akame estaba a punto de plantearle.
Quizá el Uchiha le había ganado en combate, pero Haskoz no iba a salir derrotado de aquella batalla dialéctica…
—¿De qué es?
Haskoz casi se cae de espaldas por la sorpresa. ¿Acaso no iba a citarle las mil y una razones por las que no deberían beber? ¿No iba a negarse en rotundo? ¿A decirle que un ninja no bebía? ¿O acaso era él quien se estaba columpiando? Akame solo le había preguntado por el tipo de bebida, después de todo. Eso no significaba que fuese a beber. Temeroso de romper la posible magia, no se atrevió a salir de dudas preguntando. En su lugar, se sentó en el sitio que le ofreció.
—Pues… —tuvo que sacar la botella para leer la pegatina. Con las prisas y los nervios de mantener el Henge en plena tienda de 24 horas, el Uchiha no se había parado mucho a mirar lo que había comprado—. Nihonshu —leyó—. Creo que esto se toma a pelo. Mira, hagamos una cosa —propuso. Desanudó la bandana que llevaba al cuello, realizó unos simples sellos y transformó el hitai-ate en una copa de madera. Entonces descorchó la botella y sirvió el primer vaso—. Vayámonos turnando, y cuando la copa recupere su forma original… —sonrió—. Significará que ya hemos bebido demasiado.
Le ofreció la copa.
—¿Qué me dices, compañero?
Haskoz no pudo evitar soltar una carcajada ante el comentario. ¿Qué iba a hacer sino? Era eso o ponerse a llorar por el ridículo de encargo que le habían mandado hacer, y ya se había lamentado lo suficiente a lo largo del día.
—No se bebe para celebrar, Akame-kun. Se bebe para olvidar.
Lo sabía. Sabía que tendría que derramar sangre y sudor para convencer a Akame, el alumno modélico de la Academia, de acercar siquiera sus labios a aquella bebida alcohólica. Pero sabían los Dioses que había venido preparado. En su mente, todo un arsenal de réplicas y contra-réplicas a las posibles excusas que Akame estaba a punto de plantearle.
Quizá el Uchiha le había ganado en combate, pero Haskoz no iba a salir derrotado de aquella batalla dialéctica…
—¿De qué es?
Haskoz casi se cae de espaldas por la sorpresa. ¿Acaso no iba a citarle las mil y una razones por las que no deberían beber? ¿No iba a negarse en rotundo? ¿A decirle que un ninja no bebía? ¿O acaso era él quien se estaba columpiando? Akame solo le había preguntado por el tipo de bebida, después de todo. Eso no significaba que fuese a beber. Temeroso de romper la posible magia, no se atrevió a salir de dudas preguntando. En su lugar, se sentó en el sitio que le ofreció.
—Pues… —tuvo que sacar la botella para leer la pegatina. Con las prisas y los nervios de mantener el Henge en plena tienda de 24 horas, el Uchiha no se había parado mucho a mirar lo que había comprado—. Nihonshu —leyó—. Creo que esto se toma a pelo. Mira, hagamos una cosa —propuso. Desanudó la bandana que llevaba al cuello, realizó unos simples sellos y transformó el hitai-ate en una copa de madera. Entonces descorchó la botella y sirvió el primer vaso—. Vayámonos turnando, y cuando la copa recupere su forma original… —sonrió—. Significará que ya hemos bebido demasiado.
Le ofreció la copa.
—¿Qué me dices, compañero?
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado