30/05/2017, 19:50
Datsue se obligó a soltar una risa, algo forzada, cuando Kaido sacó a la luz su repentino cambio de apellidos. En Los Herreros, donde habían coincidido hace no tanto tiempo, el Uchiha había asegurado apellidarse Sakamoto, más por precaución que por pura necesidad. Una pequeña precaución por si los negocios que allí planeaba hacer salían mal. El problema con las mentiras, sin embargo, es que tenían las patas muy cortas…
… pero como decir la verdad no era una opción, Datsue simplemente optó por contar otra, todavía más gorda.
—Eso, Kaido, tiene una explicación que seguramente te sorprenda —dijo, deteniéndose, a unos metros de los asientos. Dio la espalda a Akame, para evitar que su voz llegase a los indiscretos oídos de aquel Uchiha resabido, y añadió:—. Verás, estaba prometido con una Sakamoto. En Uzu, tenemos por costumbre que las mujeres adopten el apellido del marido… salvo cuando éstas provienen de una familia mucho más alta en la escala social que su esposo. En ese caso es al revés… y fue mi caso —aseguró, para luego encogerse de hombros—. Por desgracia, me rompieron el corazón —se llevó una mano al pecho, mientras desviaba la mirada al suelo, alicaído—. El solo hecho de recordarlo me aflige el alma, Kaido, y preferiría no hablar más sobre el tema.
Creyendo haber zanjado el asunto, se sentó junto a Akame y permaneció en silencio por unos minutos, interpretando su desdicha. Apenas hizo un gesto con la cabeza para devolver el saludo a las mujeres, diciendo su nombre en voz baja, como sin energías.
Y así permaneció un buen rato…
… pero como decir la verdad no era una opción, Datsue simplemente optó por contar otra, todavía más gorda.
—Eso, Kaido, tiene una explicación que seguramente te sorprenda —dijo, deteniéndose, a unos metros de los asientos. Dio la espalda a Akame, para evitar que su voz llegase a los indiscretos oídos de aquel Uchiha resabido, y añadió:—. Verás, estaba prometido con una Sakamoto. En Uzu, tenemos por costumbre que las mujeres adopten el apellido del marido… salvo cuando éstas provienen de una familia mucho más alta en la escala social que su esposo. En ese caso es al revés… y fue mi caso —aseguró, para luego encogerse de hombros—. Por desgracia, me rompieron el corazón —se llevó una mano al pecho, mientras desviaba la mirada al suelo, alicaído—. El solo hecho de recordarlo me aflige el alma, Kaido, y preferiría no hablar más sobre el tema.
Creyendo haber zanjado el asunto, se sentó junto a Akame y permaneció en silencio por unos minutos, interpretando su desdicha. Apenas hizo un gesto con la cabeza para devolver el saludo a las mujeres, diciendo su nombre en voz baja, como sin energías.
Y así permaneció un buen rato…
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado