4/06/2017, 19:38
Me mantuve en espera, bajo la lluvia, tras unos minutos vi que nadie venía ¿se habrían ido? Después de todo no había especificidad de que debían esperar a otros… O mejor dicho, partían de la aldea, pero nada aseguraba de que debían viajar juntos.
Mis ojos se plantaron fijamente en el sujeto que se acercaba, en otras oportunidades lo había visto por la villa, pero estaba seguro que se dirigía a mí, éste pareció percatarse y se acercó tanto que incluso pareció quedar bajo la protección de mi paraguas, pero su presencia me hizo incomodar por el atrevimiento tan grande que había tomado.
El hombre pez se manifestó, no obstante, yo no había dado un paso atrás, a pesar de la incomodidad del asunto. —Pues…— No pude terminar de expresarme cuando él comentó lo que para él era obvio, lo que más curiosidad me dio fue que acertó de lleno con sus palabras. —Sí, voy al torneo, pensé en reunirme con las personas que iban a salir de aquí, no sé exactamente dónde es.— Dije tras retroceder unos escasos centímetros, tratando de recuperar mi espacio personal.
”Sus dientes… Parecen todos como los de una sierra” Pensé un poco extrañado, aunque no debía dar muchas vueltas al asunto sobre lo raro que era ese sujeto, tenía la piel entre azul y gris y parecía un ser tosco.
Luego se manifestó un tercero, que para mi suerte era un conocido, solo con escuchar su voz sabía quién era.—Manase Mogura.— Dije su nombre completo, imitando su cordialidad. —Te dije que me dijeras Kei.— Agregué, recordando la última vez que nos habíamos visto.
—¿No me digas que a ti también te recomendaron para el Torneo de los Dojos?— Pregunté de buenas a primeras. ¿Sino por qué mas podría estar ahí a esa hora?
Me volteé a ver a tiburón, dudé un segundo pero ¿qué más daba? —Imagino que tú también te diriges hacia allá, podríamos ir juntos,¿ no?— Propuse, después de todo esa era mi idea inicial. —Por cierto, ¿Cómo debemos llamarte?— Expresé recordando que el ya había escuchado nuestros nombres.
Mis ojos se plantaron fijamente en el sujeto que se acercaba, en otras oportunidades lo había visto por la villa, pero estaba seguro que se dirigía a mí, éste pareció percatarse y se acercó tanto que incluso pareció quedar bajo la protección de mi paraguas, pero su presencia me hizo incomodar por el atrevimiento tan grande que había tomado.
El hombre pez se manifestó, no obstante, yo no había dado un paso atrás, a pesar de la incomodidad del asunto. —Pues…— No pude terminar de expresarme cuando él comentó lo que para él era obvio, lo que más curiosidad me dio fue que acertó de lleno con sus palabras. —Sí, voy al torneo, pensé en reunirme con las personas que iban a salir de aquí, no sé exactamente dónde es.— Dije tras retroceder unos escasos centímetros, tratando de recuperar mi espacio personal.
”Sus dientes… Parecen todos como los de una sierra” Pensé un poco extrañado, aunque no debía dar muchas vueltas al asunto sobre lo raro que era ese sujeto, tenía la piel entre azul y gris y parecía un ser tosco.
Luego se manifestó un tercero, que para mi suerte era un conocido, solo con escuchar su voz sabía quién era.—Manase Mogura.— Dije su nombre completo, imitando su cordialidad. —Te dije que me dijeras Kei.— Agregué, recordando la última vez que nos habíamos visto.
—¿No me digas que a ti también te recomendaron para el Torneo de los Dojos?— Pregunté de buenas a primeras. ¿Sino por qué mas podría estar ahí a esa hora?
Me volteé a ver a tiburón, dudé un segundo pero ¿qué más daba? —Imagino que tú también te diriges hacia allá, podríamos ir juntos,¿ no?— Propuse, después de todo esa era mi idea inicial. —Por cierto, ¿Cómo debemos llamarte?— Expresé recordando que el ya había escuchado nuestros nombres.