26/06/2017, 18:24
«¿Madrugar más?». El Uchiha enarcó una ceja, claramente aquella idea no le encajaba con la versión de Nabi que tenía almacenada en sus bancos de memoria. Tal vez era hora de actualizarlos.
Sea como fuere, el Senju se despachó en explicaciones. Si algo le gustaba de aquel muchacho, era precisamente eso; no había que preguntarle dos veces. Para alguien con tan pocas habilidades sociales como Akame, que apreciaba la claridad y la practicidad al comunicarse, era un buen punto a favor.
Las palabras de Nabi le arrancaron una sonrisa torcida. El estudio de su clan y su herencia genética le había costado tanto tiempo que Akame no había invertido ni un sólo día en Fuuinjutsu, y tampoco en Genjutsu. «Claro que, no hay por qué mencionarlo».
—En el Torneo tendré que enfrentarme a oponentes de otras Aldeas —respondió, duro como el hierro—. Si quiero salir victorioso, no puedo permitirme flaquear escandalosamente en ningún aspecto. Tengo que limar mis asperezas, he visto a algunos ninjas extranjeros combatir, y aunque no tienen nuestra disciplina... No hay que subestimarlos.
Sin embargo, lo que el muchacho Senju le dijo a continuación le dejó pensando un momento. «"Nada que pueda o quiera probar dentro de un dojo"...¿Está intentando picarme la curiosidad?». Akame se cruzó de brazos, inquisitivo.
—¿A qué te refieres? ¿Alguna técnica secreta, acaso?
Sea como fuere, el Senju se despachó en explicaciones. Si algo le gustaba de aquel muchacho, era precisamente eso; no había que preguntarle dos veces. Para alguien con tan pocas habilidades sociales como Akame, que apreciaba la claridad y la practicidad al comunicarse, era un buen punto a favor.
Las palabras de Nabi le arrancaron una sonrisa torcida. El estudio de su clan y su herencia genética le había costado tanto tiempo que Akame no había invertido ni un sólo día en Fuuinjutsu, y tampoco en Genjutsu. «Claro que, no hay por qué mencionarlo».
—En el Torneo tendré que enfrentarme a oponentes de otras Aldeas —respondió, duro como el hierro—. Si quiero salir victorioso, no puedo permitirme flaquear escandalosamente en ningún aspecto. Tengo que limar mis asperezas, he visto a algunos ninjas extranjeros combatir, y aunque no tienen nuestra disciplina... No hay que subestimarlos.
Sin embargo, lo que el muchacho Senju le dijo a continuación le dejó pensando un momento. «"Nada que pueda o quiera probar dentro de un dojo"...¿Está intentando picarme la curiosidad?». Akame se cruzó de brazos, inquisitivo.
—¿A qué te refieres? ¿Alguna técnica secreta, acaso?