26/07/2017, 19:46
La chica bromeó con el hecho de que algo curioso si que había llegado a encontrar, y Juro respondió con que no se arrepentía de haberse perdido por ésta senda, pero que igual interrumpía su efímero periodo de paz y tranquilidad. La chica sonrió, y negó un par de veces gesticulando con los brazos, cruzándolos y antecruzándolos.
—No, no, tranquilo por eso, que no molestas.
El genin se lanzó a afirmar que ella era la primera kunoichi de Amegakure que conocía. No tardó en afirmar que ciertamente ella no podía llegar a ser un espécimen normal, pero que de igual manera, le resultaba la mar de agradable. Totalmente elogiada, no sabía a donde quería llegar el chico con esas palabras, al menos hasta que terminó de hablar. A éste le sedujo la idea de que la chica seguramente era una exploradora espléndida, y seguramente había conocido a un montón de ninjas a lo largo de su vida.
—Bueno, la verdad es que no a demasiados... —confesó —No siempre he estado dispuesta a explorar el mundo, me tomé una buena temporada que apenas salía de casa... y con temporada me refiero a años... al principio estaba muy, pero que muy asustada de en lo que me había convertido.
La chica se encogió de hombros, intentando darle menos importancia al asunto. —Supongo que es normal, me asustaba la idea de qué podían pensar al ver que todos crecían y envejecían y yo me mantenía siempre con ésta apariencia.
»Pero bueno, al menos vi a tiempo que eso era absurdo, no servía para nada...
—No, no, tranquilo por eso, que no molestas.
El genin se lanzó a afirmar que ella era la primera kunoichi de Amegakure que conocía. No tardó en afirmar que ciertamente ella no podía llegar a ser un espécimen normal, pero que de igual manera, le resultaba la mar de agradable. Totalmente elogiada, no sabía a donde quería llegar el chico con esas palabras, al menos hasta que terminó de hablar. A éste le sedujo la idea de que la chica seguramente era una exploradora espléndida, y seguramente había conocido a un montón de ninjas a lo largo de su vida.
—Bueno, la verdad es que no a demasiados... —confesó —No siempre he estado dispuesta a explorar el mundo, me tomé una buena temporada que apenas salía de casa... y con temporada me refiero a años... al principio estaba muy, pero que muy asustada de en lo que me había convertido.
La chica se encogió de hombros, intentando darle menos importancia al asunto. —Supongo que es normal, me asustaba la idea de qué podían pensar al ver que todos crecían y envejecían y yo me mantenía siempre con ésta apariencia.
»Pero bueno, al menos vi a tiempo que eso era absurdo, no servía para nada...