5/07/2015, 21:47
La noche había sido amable con él, pues le había ofrecido un sueño ininterrumpido bastante reponedor. Sin embargo, el despertar no sería tan agradable, puesto que su cabeza zumbaba con el esfuerzo de ir contra rutina y levantarse antes del alba.
«Joder… Que sueño» —fue lo que pensó cuando se levantaba torpemente y mientras aun tenía los ojos entrecerrados.
Tenía que moverse rápido, aun era temprano, pero podría hacérsele tarde si se descuidaba. Si fuera a verse con cualquier persona no le importaría retrasarse un poco, pero ese día tenía que encontrarse con Kureji Shiori, incluso estando medio dormido, sabía que llegarle tarde a aquella mujer sería algo desastroso.
Por lo que se dio un rápido baño con agua fría, y luego de tomarse un té caliente, salió de su casa bajo el amparo de la oscuridad que precede al amanecer.
Por las calles hacia frío, pero el joven estaba consciente de que se dirigía a las playas de Uzu. En cuanto asomaran los primeros rayos del sol, el calor del verano haría notar su presencia. Por lo que se fue con su nuevo conjunto blanco. Lo único diferente que había llevado consigo era el bañador que traía bajo su ropa.
En cuanto llego al playón de las costas del remolino se detuvo un instante a tomar aire.
El aire aun estaba tan frío, tanto que su aliento formaba nubecillas. Sin embargo el azul nocturno del cielo se hacía cada vez más claro, indicando que faltaba poco para el amanecer. Eso también indicaba que había llegado a tiempo.
Mas sin embargo, no era el primero en presentarse a la reunión.
«Veamos —pensó mientras examinaba la línea costera—. Espera, ese chico se parece… Claro, debe ser Juro, joder ese chico si debió madrugar»
«Me pregunto si donde esta de pie es el lugar donde debemos esperar a la Jonin. Mejor me acerco a preguntarle»
Con calma se acerco a su compañero de cabellos negros, mientras que se aseguraba de hacer suficiente ruido al caminar para no llegarle de sorpresa.
—Eh Juro, buenos días ¿Cuánto tiempo llevas aquí? —pregunto mientras se frotaba las manos, y hacia con ella hacia una concavidad para soplar su cálido aliento en el centro.
«Joder… Que sueño» —fue lo que pensó cuando se levantaba torpemente y mientras aun tenía los ojos entrecerrados.
Tenía que moverse rápido, aun era temprano, pero podría hacérsele tarde si se descuidaba. Si fuera a verse con cualquier persona no le importaría retrasarse un poco, pero ese día tenía que encontrarse con Kureji Shiori, incluso estando medio dormido, sabía que llegarle tarde a aquella mujer sería algo desastroso.
Por lo que se dio un rápido baño con agua fría, y luego de tomarse un té caliente, salió de su casa bajo el amparo de la oscuridad que precede al amanecer.
Por las calles hacia frío, pero el joven estaba consciente de que se dirigía a las playas de Uzu. En cuanto asomaran los primeros rayos del sol, el calor del verano haría notar su presencia. Por lo que se fue con su nuevo conjunto blanco. Lo único diferente que había llevado consigo era el bañador que traía bajo su ropa.
En cuanto llego al playón de las costas del remolino se detuvo un instante a tomar aire.
El aire aun estaba tan frío, tanto que su aliento formaba nubecillas. Sin embargo el azul nocturno del cielo se hacía cada vez más claro, indicando que faltaba poco para el amanecer. Eso también indicaba que había llegado a tiempo.
Mas sin embargo, no era el primero en presentarse a la reunión.
«Veamos —pensó mientras examinaba la línea costera—. Espera, ese chico se parece… Claro, debe ser Juro, joder ese chico si debió madrugar»
«Me pregunto si donde esta de pie es el lugar donde debemos esperar a la Jonin. Mejor me acerco a preguntarle»
Con calma se acerco a su compañero de cabellos negros, mientras que se aseguraba de hacer suficiente ruido al caminar para no llegarle de sorpresa.
—Eh Juro, buenos días ¿Cuánto tiempo llevas aquí? —pregunto mientras se frotaba las manos, y hacia con ella hacia una concavidad para soplar su cálido aliento en el centro.