2/08/2017, 20:07
Cuando al fin llegaron al final del sendero, el Uchiha cayó de rodillas, poniendo justo a tiempo las manos para no estamparse la cara contra el suelo. Exhausto, sus pulmones apenas lograban abrirse, y veía puntitos de luz aquí y allá, mareado. Sintió el cosquilleo de varias gotas de sudor recorriendo su frente hasta la punta de la nariz, cayendo finalmente a gotas sobre el suelo, como un grifo mal cerrado.
Las imágenes del pueblo todavía estaban grabadas en su retina. Recordó cómo Kaido se había ocupado del flanco izquierdo; cómo Akame, tras la bomba sonora, había calcinado al grupo del flanco derecho. Recordaba los gritos; el olor nauseabundo a piel derretida; la carne chamuscada hasta los huesos...
—¡Buagh…!
Un chorro de vómito salió despedido por su boca, incapaz de contenerse. Luego tosió y escupió, asqueado, la bilis suelta que le quedaba colgando de los labios. Respiraba de forma entrecortada, y la ropa se le pegaba a la piel, empapada en sudor. Finalmente, se limpió la boca con la manga. En definitiva, estaba hecho un desastre.
—¡Vámonos! —rugió Akame, tras recuperarse del pequeño respiro que también se había tomado.
Datsue levantó la cabeza: allí estaba el barco, su salvación, junto a la tripulación lista para embarcar. Luego miró atrás y comprobó que sus perseguidores ya habían reducido buena parte de la distancia que les separaba. «Solo un último esfuerzo» se dijo, impulsándose a fuerza de pura voluntad hacia arriba.
«Solo un último esfuerzo…» Y echó a correr hacia el barco sin volver a mirar atrás...
Las imágenes del pueblo todavía estaban grabadas en su retina. Recordó cómo Kaido se había ocupado del flanco izquierdo; cómo Akame, tras la bomba sonora, había calcinado al grupo del flanco derecho. Recordaba los gritos; el olor nauseabundo a piel derretida; la carne chamuscada hasta los huesos...
—¡Buagh…!
Un chorro de vómito salió despedido por su boca, incapaz de contenerse. Luego tosió y escupió, asqueado, la bilis suelta que le quedaba colgando de los labios. Respiraba de forma entrecortada, y la ropa se le pegaba a la piel, empapada en sudor. Finalmente, se limpió la boca con la manga. En definitiva, estaba hecho un desastre.
—¡Vámonos! —rugió Akame, tras recuperarse del pequeño respiro que también se había tomado.
Datsue levantó la cabeza: allí estaba el barco, su salvación, junto a la tripulación lista para embarcar. Luego miró atrás y comprobó que sus perseguidores ya habían reducido buena parte de la distancia que les separaba. «Solo un último esfuerzo» se dijo, impulsándose a fuerza de pura voluntad hacia arriba.
«Solo un último esfuerzo…» Y echó a correr hacia el barco sin volver a mirar atrás...
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado