11/08/2017, 14:46
Como de costumbre, la respuesta del artista no fue la que Akame habría deseado. Ni siquiera la que habría esperado. A esas alturas ya se estaba acostumbrando a la forma de ser de Satomu —o al menos a tolerarla sin sentir ganas de abrirle la cabeza con su espada—, de modo que simplemente se encogió de hombros y puso cara de "vale".
Lo interesante empezó poco después. El escultor se ubicó en su lugar de trabajo y empezó la faena. Akame, que no había desactivado su Sharingan, pudo ver con todo lujo de detalles el chakra de Satomu fluir por su cuerpo y, especialmente, sus manos. En un momento dado, cuando la energía se traspasó a las herramientas, Kotetsu hizo una pregunta que dejó al Uchiha anonadado. «¿Chakra visible? ¿Entonces los demás también pueden verlo?»
El Uchiha había unido las piezas y ahora tenía claro que Nishijima Satomu no siempre había esculpido tal y como estaba haciéndolo en ese momento. Las esculturas apartadas en el rincón, sus "proyectos fallidos", así lo evidenciaban. «La cuestión es... ¿Cuándo y cómo adquirió semejante habilidad moldeando su chakra?»
—Impresionante, Nishijima-san —admitió el Uchiha, sincero—. ¿Cuándo aprendió a manejar su chakra de esa forma?
Disparó sin tapujos, sin remordimientos. Estaba cansado de perseguir a la verdad como un perro persigue a un carromato; siempre detrás, siempre sin lograr alcanzarlo.
—¿Qué más aplicaciones conoce?
Lo interesante empezó poco después. El escultor se ubicó en su lugar de trabajo y empezó la faena. Akame, que no había desactivado su Sharingan, pudo ver con todo lujo de detalles el chakra de Satomu fluir por su cuerpo y, especialmente, sus manos. En un momento dado, cuando la energía se traspasó a las herramientas, Kotetsu hizo una pregunta que dejó al Uchiha anonadado. «¿Chakra visible? ¿Entonces los demás también pueden verlo?»
El Uchiha había unido las piezas y ahora tenía claro que Nishijima Satomu no siempre había esculpido tal y como estaba haciéndolo en ese momento. Las esculturas apartadas en el rincón, sus "proyectos fallidos", así lo evidenciaban. «La cuestión es... ¿Cuándo y cómo adquirió semejante habilidad moldeando su chakra?»
—Impresionante, Nishijima-san —admitió el Uchiha, sincero—. ¿Cuándo aprendió a manejar su chakra de esa forma?
Disparó sin tapujos, sin remordimientos. Estaba cansado de perseguir a la verdad como un perro persigue a un carromato; siempre detrás, siempre sin lograr alcanzarlo.
—¿Qué más aplicaciones conoce?