9/07/2015, 23:01
La verdad es que en ese momento poco me importaban las palabras que Kori tuvieran para nosotros. Mas importante para mi es que ya era libre y podía echarle mano a una de esas jugosas y sabrosas bolsitas de sangre que siempre transportaba conmigo. La devore vorazmente, como el lobo hambriento, que después de dos días sin comer se encuentra con un pobre e indefenso conejillo.
Aunque parecía que no, escuche lo que le dijo a Daruu, pese a que no le preste atención del todo, pero me quede con algunas cosas. Al parecer el método que había usado para conservar el cascabel no era el adecuado, pese a que kori jamas había especificado en que estado debía encontrarse el cascabel, solo había dicho que lo tuviéramos encima.
Y luego llego mi turno y el de Ayame. No me dejo responder, pero no pensaba guardarme nada. Ni una sola palabra. Antes de entregar mi bandana, como el nos estaba exigiendo por suspender la prueba, y a soltarle todo lo que pensaba.
—Creo que el único aquí que no me ha tomado en serio eres tu, no pienso pararme a explicarle a un Jonin el por que del perezoso, que por cierto a funcionado como yo esperaba, deberías saberlo, pero claro, te has pasado toda la prueba subestimando mis capacidades, te has puesto delante de Ayame por que pensabas que yo seria capaz de golpear a un compañero, cuando soy capaz de controlar mi sangre a la perfección, podría haberlo desecho justo antes de que impactara, y hubiese conseguido el mismo resultado, alejarte de mi compañera, pero otra volviste a subestimarme, no me has tomado en serio desde el principio[/crimson] — No estaba cabreado, todo mi sermón era un tono calmado, aunque serio —[Color=crimson]Puedes quedarte mi bandana si quieres, la recuperare de manos de alguien que si me tome en serio —Le lance la bandana suavemente, pero ni siquiera me acerque a dársela — Por otro lado, nunca especificaste en que estado teníamos que mantener los cascabeles, simplemente dijiste que los conserváramos y ya, se la has colado a Daruu, pero no a mi
Me di la vuelta y me marche, transformándome en un cuervo, para volar hasta la azotea de mi casa, donde me quedaría un rato a pensar sobre lo que había sucedido aquella mañana.
Aunque parecía que no, escuche lo que le dijo a Daruu, pese a que no le preste atención del todo, pero me quede con algunas cosas. Al parecer el método que había usado para conservar el cascabel no era el adecuado, pese a que kori jamas había especificado en que estado debía encontrarse el cascabel, solo había dicho que lo tuviéramos encima.
Y luego llego mi turno y el de Ayame. No me dejo responder, pero no pensaba guardarme nada. Ni una sola palabra. Antes de entregar mi bandana, como el nos estaba exigiendo por suspender la prueba, y a soltarle todo lo que pensaba.
—Creo que el único aquí que no me ha tomado en serio eres tu, no pienso pararme a explicarle a un Jonin el por que del perezoso, que por cierto a funcionado como yo esperaba, deberías saberlo, pero claro, te has pasado toda la prueba subestimando mis capacidades, te has puesto delante de Ayame por que pensabas que yo seria capaz de golpear a un compañero, cuando soy capaz de controlar mi sangre a la perfección, podría haberlo desecho justo antes de que impactara, y hubiese conseguido el mismo resultado, alejarte de mi compañera, pero otra volviste a subestimarme, no me has tomado en serio desde el principio[/crimson] — No estaba cabreado, todo mi sermón era un tono calmado, aunque serio —[Color=crimson]Puedes quedarte mi bandana si quieres, la recuperare de manos de alguien que si me tome en serio —Le lance la bandana suavemente, pero ni siquiera me acerque a dársela — Por otro lado, nunca especificaste en que estado teníamos que mantener los cascabeles, simplemente dijiste que los conserváramos y ya, se la has colado a Daruu, pero no a mi
Me di la vuelta y me marche, transformándome en un cuervo, para volar hasta la azotea de mi casa, donde me quedaría un rato a pensar sobre lo que había sucedido aquella mañana.