30/08/2017, 16:06
Ambos genin buscaron con la mirada al sujeto que solicitaba auxilio, éste corría como el viento hacia su dirección, pero lo hacía sin nada o nadie que lo persiguiese. El hombre, sin pensarlo siquiera, inquirió a los jóvenes que le ayudasen. Su respiración estaba realmente agitada, se notaba que había estado corriendo a todo pulmón durante un buen trecho. Al llegar a la altura de la chica, se lanzó hacia el cuello de su yukata, desesperado. Una vez mas, imploró ayuda, y afirmó que le estaban siguiendo, y que si lo encontraban, algo mas... pero no llegó a terminar de explicarse, al parecer el hombre había sido alcanzado por aquello de lo que huía.
—Tranquilo, no pasará nada. Estás delante de la combatiente que va a ganar el torneo. —se echó flores.
Sin pensarlo, giró sobre sí misma, dejando al hombre tras el frente del problema, y volvió a girar sin el susodicho, para afrontar el peligro ella. Bueno, Riko también estaba allí, pero en fin, tampoco podía exigirle nada. Sin meditarlo demasiado, lanzó la mirada hacia el frente, dispuesta a afrontar con valor digno de un héroe el peligro que resultaba inminente. No tenía su uniforme de superheroína, pero bueno, qué mas pedirle a la situación... no llevaba ni sus armas.
—Quédate detrás mía.
Con esa orden dada, la chica alzó la guardia, dispuesta a pelear con aquello que perseguía al hombre, ya fuese una bestia o una persona.
—Tranquilo, no pasará nada. Estás delante de la combatiente que va a ganar el torneo. —se echó flores.
Sin pensarlo, giró sobre sí misma, dejando al hombre tras el frente del problema, y volvió a girar sin el susodicho, para afrontar el peligro ella. Bueno, Riko también estaba allí, pero en fin, tampoco podía exigirle nada. Sin meditarlo demasiado, lanzó la mirada hacia el frente, dispuesta a afrontar con valor digno de un héroe el peligro que resultaba inminente. No tenía su uniforme de superheroína, pero bueno, qué mas pedirle a la situación... no llevaba ni sus armas.
—Quédate detrás mía.
Con esa orden dada, la chica alzó la guardia, dispuesta a pelear con aquello que perseguía al hombre, ya fuese una bestia o una persona.