11/09/2017, 00:03
La chica empezó a explicar lo que recordaba.
al parecer, nos encontramos durante primavera en el puente Kannabi, frontera que separaba nuestros respectivos países de origen. Fue allí donde tuvimos lo que al parecer fue un fugaz encuentro del cual un chiquillo nos interrumpió al ver que su mascota, un gato, estaba en peligro.
— ¡Yoko! ¡El gato se llamaba Yoko!
Fue como un flashazo que me golpeó la frente de golpe. Alguien llamó a Eri y esta tuvo que irse y ni siquiera se despidió de mi. Sí... empezaba a recordar cosas. Y entonces tuve que hacer algo con aquella gata... Pero Eri parecía apenada, le costaba mantenerse firme y mirarme al mismo tiempo que observaba los pocos dangos que aún le quedaban
—Pero no fui a por el gato, al final cuando quise ir a por él creo que me fui porque mi hermano me llamó, teníamos mucha prisa, así que solo pude despedirme del chico —pausa —. No sé si al final pudo rescatar al gato o qué pasó, ya que me fui... Pero... Bueno, eso es todo.
— Sí, tienes razón, ahora lo recuerdo. Eras tu, sin duda. ¿como podría haber olvidado una chica tan guapa? Este Yota.... En fin, no tenías ninguna obligación de ir a rescatar aquella gata — dije tratando de calmarla. Estaba realmente apenada, como si fuera a pensar que huyó del lugar como alma perseguida por el diablo — Digamos... que yo me ocupe del rescate
al parecer, nos encontramos durante primavera en el puente Kannabi, frontera que separaba nuestros respectivos países de origen. Fue allí donde tuvimos lo que al parecer fue un fugaz encuentro del cual un chiquillo nos interrumpió al ver que su mascota, un gato, estaba en peligro.
— ¡Yoko! ¡El gato se llamaba Yoko!
Fue como un flashazo que me golpeó la frente de golpe. Alguien llamó a Eri y esta tuvo que irse y ni siquiera se despidió de mi. Sí... empezaba a recordar cosas. Y entonces tuve que hacer algo con aquella gata... Pero Eri parecía apenada, le costaba mantenerse firme y mirarme al mismo tiempo que observaba los pocos dangos que aún le quedaban
—Pero no fui a por el gato, al final cuando quise ir a por él creo que me fui porque mi hermano me llamó, teníamos mucha prisa, así que solo pude despedirme del chico —pausa —. No sé si al final pudo rescatar al gato o qué pasó, ya que me fui... Pero... Bueno, eso es todo.
— Sí, tienes razón, ahora lo recuerdo. Eras tu, sin duda. ¿como podría haber olvidado una chica tan guapa? Este Yota.... En fin, no tenías ninguna obligación de ir a rescatar aquella gata — dije tratando de calmarla. Estaba realmente apenada, como si fuera a pensar que huyó del lugar como alma perseguida por el diablo — Digamos... que yo me ocupe del rescate
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa