12/09/2017, 03:14
(Última modificación: 12/09/2017, 03:17 por Uchiha Datsue.)
Cuando Nabi terminó de hablar, el Uchiha emitió un silbido prolongado, asombrado.
—Te gusta hablar, ¿eh? —comentó, risueño. Aquel chico era como él: hablaba un montón y no dejaba hablar al resto. Normalmente, cuando solo había en el grupo alguien así, no pasaba nada. Pero cuando se juntaban dos, como en aquel caso… O empezaban a darse turnos, o lo iban a pasar mal.
Se rascó la nuca, repasando todo lo que le había dicho Nabi. Había mucho que comentar.
—A ver… Iré directo al grano, al meollo del asunto: la camaradería. O la falta de ella. En realidad, estoy en parte de acuerdo. No en el ejemplo específico de atacar a alguien por la espalda… Pero sí, yo también lo he notado. Pero, ¿sabes en qué? No en cosas como las de Kotetsu. Ni la mía. Tú vas a lo bruto. Al último fin de la camaradería: no traicionar a tu compañero. No, Nabi. No hace falta mirar tan lejos. Fíjate en los detalles. En las pequeñas cosas. ¿Quieres que te de ejemplos?
»Fíjate en ti. En tu grupo. El noventa por ciento de los que hemos venido aquí son de tu promoción. ¿Cuántas quedadas organizasteis para cenar todos juntos? ¿Cuántas comidas? ¿Cuántos desayunos? —formó un cero con la mano—. Ninguna. Eso, o fui yo el único sin invitar —bromeó. Siempre era una remota posibilidad—. ¿Sabes que hubiese pasado si fuese mi grupo de promoción el que hubiese venido aquí? Que el día que no cenásemos juntos, sería la excepción. Y me dirás: tío, comer con alguien no significa ser más o menos camarada. Y sí, te tendría que dar la razón… Pero no me negarás que denota algo, tío. Denota algo —repitió, juntando los dedos de una mano, apuntando hacia arriba, y oscilando la mano de abajo a arriba—. Hablas de desobedecer a un Kage por un compañero, de confiarle tu vida… Pero en casi un puto mes que llevamos viviendo en el mismo puto edificio, no le has confiado ni los putos buenos días a la mayoría de los que estamos aquí. Eh, y si me equivoco… Si me equivoco —Datsue hizo un gesto como de llevarse la mano a la boca, y luego cerró sus labios con la diestra como si de una cremallera se tratase—. Si me equivoco dímelo ahora y haces que me trague mis palabras. Y me cierras la boca. Pero, ¿sabes qué? Creo que no puedes hacerlo. Porque al menos, conmigo no lo hiciste. De hecho, esta es la primera vez que hablamos, y porque he sido yo el que me he acercado, sino igual ni eso. ¿Me estás siguiendo? Ahí falla algo. Vale, somos compatriotas. Vale, compartimos el mismo amor por una bandera, por un país… —«O lo compartís vosotros, al menos»—. Pero eso es quedarse en lo básico. En lo fácil. Repito: ¿cuántas veces has hablado en estas cuatro semanas con tus compañeros? Apuesto qué salvo uno o dos compañeros como excepción, con el resto un par de veces tan solo. Y estoy siendo generoso. Y no digo de cruzarse por el pasillo y levantar la cabeza a modo de saludo. Digo de hablar al menos cinco minutillos. Es más, apuesto que hay gente a la que ni siquiera le has dirigido la palabra en este mes. ¿Me equivoco? Si es así, me callo. Sino... —le guiñó un ojo—, seguirá siendo mi turno de palabra.
—Te gusta hablar, ¿eh? —comentó, risueño. Aquel chico era como él: hablaba un montón y no dejaba hablar al resto. Normalmente, cuando solo había en el grupo alguien así, no pasaba nada. Pero cuando se juntaban dos, como en aquel caso… O empezaban a darse turnos, o lo iban a pasar mal.
Se rascó la nuca, repasando todo lo que le había dicho Nabi. Había mucho que comentar.
—A ver… Iré directo al grano, al meollo del asunto: la camaradería. O la falta de ella. En realidad, estoy en parte de acuerdo. No en el ejemplo específico de atacar a alguien por la espalda… Pero sí, yo también lo he notado. Pero, ¿sabes en qué? No en cosas como las de Kotetsu. Ni la mía. Tú vas a lo bruto. Al último fin de la camaradería: no traicionar a tu compañero. No, Nabi. No hace falta mirar tan lejos. Fíjate en los detalles. En las pequeñas cosas. ¿Quieres que te de ejemplos?
»Fíjate en ti. En tu grupo. El noventa por ciento de los que hemos venido aquí son de tu promoción. ¿Cuántas quedadas organizasteis para cenar todos juntos? ¿Cuántas comidas? ¿Cuántos desayunos? —formó un cero con la mano—. Ninguna. Eso, o fui yo el único sin invitar —bromeó. Siempre era una remota posibilidad—. ¿Sabes que hubiese pasado si fuese mi grupo de promoción el que hubiese venido aquí? Que el día que no cenásemos juntos, sería la excepción. Y me dirás: tío, comer con alguien no significa ser más o menos camarada. Y sí, te tendría que dar la razón… Pero no me negarás que denota algo, tío. Denota algo —repitió, juntando los dedos de una mano, apuntando hacia arriba, y oscilando la mano de abajo a arriba—. Hablas de desobedecer a un Kage por un compañero, de confiarle tu vida… Pero en casi un puto mes que llevamos viviendo en el mismo puto edificio, no le has confiado ni los putos buenos días a la mayoría de los que estamos aquí. Eh, y si me equivoco… Si me equivoco —Datsue hizo un gesto como de llevarse la mano a la boca, y luego cerró sus labios con la diestra como si de una cremallera se tratase—. Si me equivoco dímelo ahora y haces que me trague mis palabras. Y me cierras la boca. Pero, ¿sabes qué? Creo que no puedes hacerlo. Porque al menos, conmigo no lo hiciste. De hecho, esta es la primera vez que hablamos, y porque he sido yo el que me he acercado, sino igual ni eso. ¿Me estás siguiendo? Ahí falla algo. Vale, somos compatriotas. Vale, compartimos el mismo amor por una bandera, por un país… —«O lo compartís vosotros, al menos»—. Pero eso es quedarse en lo básico. En lo fácil. Repito: ¿cuántas veces has hablado en estas cuatro semanas con tus compañeros? Apuesto qué salvo uno o dos compañeros como excepción, con el resto un par de veces tan solo. Y estoy siendo generoso. Y no digo de cruzarse por el pasillo y levantar la cabeza a modo de saludo. Digo de hablar al menos cinco minutillos. Es más, apuesto que hay gente a la que ni siquiera le has dirigido la palabra en este mes. ¿Me equivoco? Si es así, me callo. Sino... —le guiñó un ojo—, seguirá siendo mi turno de palabra.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado