17/09/2017, 13:34
(Última modificación: 17/09/2017, 15:14 por Uchiha Akame.
Razón: Se me olvidó el sellito de la confrontación este XD
)
Akame asintió, conforme, ante la réplica de su ahora contrincante. «Si consiguió eliminar a Datsue-kun debe ser bastante fuerte, algo me dice que este combate va a estar bien...» Imitando a Daruu, el Uchiha también estiró brazos y piernas, articulaciones y dio un par de saltitos para entrar en calor. El fuego de Amaterasu que había bombeado por sus venas al enterarse de todo el asunto de la revista era ahora sustituido por un líquido congelado, frío y que le ayudaba a concentrarse en la batalla. Por eso Akame adoraba pelear. Le hacía olvidarse de todo lo demás.
Realizó el sello de la Confrontación en respuesta al que había hecho su oponente.
Con un rápido vistazo, el Uchiha determinó las dimensiones del campo de batalla. El puente tenía unos tres metros y medio de ancho, y bajo él estaba el lago. Ellos dos se encontraban ahora a unos seis metros de distancia. No sabía nada de las habilidades de aquel amejin, de modo que lanzarse en una carga frontal no era una opción. «Claro que, siempre puedo mandar a otro a que lo haga por mi...»
Akame formuló el sello del Tigre con ambas manos y escupió un chorro de cenizas ardientes que se arremolinaron frente a él, tomando finalmente una forma idéntica a la suya. Acto seguido, el clon de cenizas arremetió a la carga contra Daruu. Cuando llegase a distancia de cuerpo a cuerpo, el Haijinbunshin le lanzaría un directo a la nariz para luego dar un paso rápido hacia el flanco izquierdo del amejin e intentar conectarle otro puñetazo en la mandíbula.
Realizó el sello de la Confrontación en respuesta al que había hecho su oponente.
Con un rápido vistazo, el Uchiha determinó las dimensiones del campo de batalla. El puente tenía unos tres metros y medio de ancho, y bajo él estaba el lago. Ellos dos se encontraban ahora a unos seis metros de distancia. No sabía nada de las habilidades de aquel amejin, de modo que lanzarse en una carga frontal no era una opción. «Claro que, siempre puedo mandar a otro a que lo haga por mi...»
Akame formuló el sello del Tigre con ambas manos y escupió un chorro de cenizas ardientes que se arremolinaron frente a él, tomando finalmente una forma idéntica a la suya. Acto seguido, el clon de cenizas arremetió a la carga contra Daruu. Cuando llegase a distancia de cuerpo a cuerpo, el Haijinbunshin le lanzaría un directo a la nariz para luego dar un paso rápido hacia el flanco izquierdo del amejin e intentar conectarle otro puñetazo en la mandíbula.