30/09/2017, 20:07
Era interesante ver que alguien que fácilmente podría darle una paliza aceptase tan fácilmente los argumentos que ella planteaba. Que tampoco eran brillantes ni tenía argumentos tan sólidos pero… Ambos Uchihas terminaban por aceptar lo que ella les decía.
Lo malo era que justo cuando empezaba a lograr que Akame diera su brazo a torcer, la mujer que les había atendido llegó con unos tazones enormes llenos de ramen que desviaron totalmente la atención de la rubia.
Embobada, así quedó la joven kunoichi al mirar perdidamente el contenido de aquel bol que estaba delante suyo. Tenía una cantidad inmensa de comida a su alcance y por sobre todas las cosas, era algo saludable, no tendría que engordarla demasiado, pero en semejante cantidad probablemente terminaría por hacerlo y… No le importaba en lo más mínimo, después de todo, cualquier idea de llenarse el estómago con comida hasta el límite de lo posible siempre le resultaba seductora así fuese perjudicial para su salud.
Como si nunca hubiesen tocado un tema de importancia, la chica tomó los palillos y comenzó a engullir fideos como si su vida dependiera de ello. Por lo menos sabían bien, estaban muy buenos pero… La conversación se fue al carajo rápido por la pésima atención que prestaba la kunoichi al tener comida cerca.
Lo malo era que justo cuando empezaba a lograr que Akame diera su brazo a torcer, la mujer que les había atendido llegó con unos tazones enormes llenos de ramen que desviaron totalmente la atención de la rubia.
Embobada, así quedó la joven kunoichi al mirar perdidamente el contenido de aquel bol que estaba delante suyo. Tenía una cantidad inmensa de comida a su alcance y por sobre todas las cosas, era algo saludable, no tendría que engordarla demasiado, pero en semejante cantidad probablemente terminaría por hacerlo y… No le importaba en lo más mínimo, después de todo, cualquier idea de llenarse el estómago con comida hasta el límite de lo posible siempre le resultaba seductora así fuese perjudicial para su salud.
Como si nunca hubiesen tocado un tema de importancia, la chica tomó los palillos y comenzó a engullir fideos como si su vida dependiera de ello. Por lo menos sabían bien, estaban muy buenos pero… La conversación se fue al carajo rápido por la pésima atención que prestaba la kunoichi al tener comida cerca.