13/12/2017, 01:14
Datsue suspiró. ¿Hablar con Blame? Él no lo consideraría ni una opción. Para empezar, tendría que encontrarle. Luego, en el caso de que siguiese vivo, sacarle la información de dónde estaba su padre. Ninguna de las dos tareas parecía sencilla, pero, aún de tener éxito, ¿luego qué? Seguramente lo hubiese dejado tirado en alguna zanja. Después de tanto tiempo, y sin haber sido enterrado en un baúl en condiciones, era imposible que quedasen restos de él.
En definitiva, que le había dado falsas esperanzas por nada. «Felicidades, te quedas sin noche feliz y sin cuadro. Estás hecho todo un kusareño».
Pero no todo tenía que verlo desde el lado negativo. Aquella noche había dado un paso importantísimo, un paso de gigantes. Había descubierto el objeto que otorgaba la inmortalidad a Aiko. Todavía no lo tenía en su poder, y, de tenerlo, no sabría ni por dónde empezar a analizarlo, pero algo era algo.
—Será mejor que descansemos, Datsue. Mañana será un día largo, y seguro que nos topamos con mas tonterías por parte de los académicos. Debemos estar despiertos para salirnos con la nuestra.
Suspiró.
—Sí, tienes razón… —En otro momento, en otras circunstancias, le hubiese dado un beso de buenas noches. Pero después de hacerle pensar, aunque solo fuese por un instante, que podría recuperar a su padre… probablemente la chica no tuviese muchas ganas de carantoñas. Así pues, se despidió con un gesto de mano—. Buenas noches, Aiko-chan. —Era la primera vez que empleaba aquel diminutivo con ella.
Quizá la kunoichi tenía mucho que pensar aquella noche, pero el Uchiha no se quedaba atrás. Arrebujado ya en su saco de dormir, empezó a meditar en las mil y una maneras en que podía robarle aquel retrato sin que se diese cuenta. O en las mil y una excusas que podía emplear para que le dejase examinarlo nuevamente. Luego, siguió pensando en ella, pero en términos más… románticos. Aunque aquella no era la palabra exacta. De ahí, al día que afrontarían a la mañana siguiente. ¿Serían capaces de distinguir todas y cada una de las trampas? Datsue nunca había sido muy optimista, y tampoco lo era aquella noche, en la que poco a poco fue quedándose dormido…
En definitiva, que le había dado falsas esperanzas por nada. «Felicidades, te quedas sin noche feliz y sin cuadro. Estás hecho todo un kusareño».
Pero no todo tenía que verlo desde el lado negativo. Aquella noche había dado un paso importantísimo, un paso de gigantes. Había descubierto el objeto que otorgaba la inmortalidad a Aiko. Todavía no lo tenía en su poder, y, de tenerlo, no sabría ni por dónde empezar a analizarlo, pero algo era algo.
—Será mejor que descansemos, Datsue. Mañana será un día largo, y seguro que nos topamos con mas tonterías por parte de los académicos. Debemos estar despiertos para salirnos con la nuestra.
Suspiró.
—Sí, tienes razón… —En otro momento, en otras circunstancias, le hubiese dado un beso de buenas noches. Pero después de hacerle pensar, aunque solo fuese por un instante, que podría recuperar a su padre… probablemente la chica no tuviese muchas ganas de carantoñas. Así pues, se despidió con un gesto de mano—. Buenas noches, Aiko-chan. —Era la primera vez que empleaba aquel diminutivo con ella.
Quizá la kunoichi tenía mucho que pensar aquella noche, pero el Uchiha no se quedaba atrás. Arrebujado ya en su saco de dormir, empezó a meditar en las mil y una maneras en que podía robarle aquel retrato sin que se diese cuenta. O en las mil y una excusas que podía emplear para que le dejase examinarlo nuevamente. Luego, siguió pensando en ella, pero en términos más… románticos. Aunque aquella no era la palabra exacta. De ahí, al día que afrontarían a la mañana siguiente. ¿Serían capaces de distinguir todas y cada una de las trampas? Datsue nunca había sido muy optimista, y tampoco lo era aquella noche, en la que poco a poco fue quedándose dormido…
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado