21/12/2017, 16:54
«Yataru Katori», se repitió mentalmente el Uchiha.
Luego escuchó con atención la información que le ofrecía Shinjaka. «Parece un tipo listo, y tiene contactos, de eso no cabe duda». Hasta el momento, el aprendiz de herrero había demostrado que no estaba allí para jugar; tenía bien ubicado al objetivo, a las personas que se relacionaban con él y los lugares por los que se movía. Shinjaka había hecho un auténtico trabajo de reconocimiento y recolección de información, digno de un shinobi.
—Quizá deberías pensar en alistarte, Shinjaka-san —le dijo el Uchiha con tono mordaz—. Está claro que sabes ver, y sabes oír, dos cualidades esenciales para cualquier shinobi. Por algo se empieza.
Realizada la chanza —aunque también había algo de seriedad en aquel consejo—, Akame asintió con convicción. Tenían un hilo del que tirar.
—Vayamos a su casa entonces. Parece la mejor pista que tenemos ahora mismo.
Luego escuchó con atención la información que le ofrecía Shinjaka. «Parece un tipo listo, y tiene contactos, de eso no cabe duda». Hasta el momento, el aprendiz de herrero había demostrado que no estaba allí para jugar; tenía bien ubicado al objetivo, a las personas que se relacionaban con él y los lugares por los que se movía. Shinjaka había hecho un auténtico trabajo de reconocimiento y recolección de información, digno de un shinobi.
—Quizá deberías pensar en alistarte, Shinjaka-san —le dijo el Uchiha con tono mordaz—. Está claro que sabes ver, y sabes oír, dos cualidades esenciales para cualquier shinobi. Por algo se empieza.
Realizada la chanza —aunque también había algo de seriedad en aquel consejo—, Akame asintió con convicción. Tenían un hilo del que tirar.
—Vayamos a su casa entonces. Parece la mejor pista que tenemos ahora mismo.