1/02/2018, 17:55
Ryu miró a ambos chicos, uno tratando de tranquilizar a un pequeño perro de pelaje oscuro y el otro mirando al par que a su lado se encontraban. Sin duda aquella estampa era una de las cosas más raras que había visto.
— Vale, gracias, pues le acompañamos, jefe, capitán, Ryuusuke-sama, Uzumaki-senpai. ¿Pero seguro que Eri-chan está bien?
—Por favor, solo llámadme Ryuusuke —aclaró antes de que empezase aquel juego de sufijos a los que no estaba del todo acostumbrado —. Y sí, está bien, supongo que lo único que necesita será descanso, pero siempre podéis pasar a verla después.
— ¡Genial! ¡Muchas gracias! Por supuesto que le acompañaremos para dejar bien a Eri. La verdad es que sí que tenemos que llegar a un sitio. No tenemos mucha idea, pero le iremos diciendo. Quizá sepa algo.
—Claro, vamos, contadme por el camino dónde es.
El chuunin comenzó a caminar hasta el interior de Tane-Shigai, y la ciudad, a esas horas del amanecer, comenzaba a despertarse muy lentamente. Un par de grupos mixtos de personas se dirigían a hacer sus tareas normales como cualquier otro día, algunas otras iban hacia el mercado a conseguir los mejores productos del día, otros simplemente hacían ejercicio, así que gracias a ello no les fue difícil encontrar el lugar donde se hospedaba Ryuusuke.
El pelirrojo se excusó y subió a su habitación a dejar a su hermana. Unos diez minutos después bajó con un mapa entre sus manos.
— Vale, gracias, pues le acompañamos, jefe, capitán, Ryuusuke-sama, Uzumaki-senpai. ¿Pero seguro que Eri-chan está bien?
—Por favor, solo llámadme Ryuusuke —aclaró antes de que empezase aquel juego de sufijos a los que no estaba del todo acostumbrado —. Y sí, está bien, supongo que lo único que necesita será descanso, pero siempre podéis pasar a verla después.
— ¡Genial! ¡Muchas gracias! Por supuesto que le acompañaremos para dejar bien a Eri. La verdad es que sí que tenemos que llegar a un sitio. No tenemos mucha idea, pero le iremos diciendo. Quizá sepa algo.
—Claro, vamos, contadme por el camino dónde es.
El chuunin comenzó a caminar hasta el interior de Tane-Shigai, y la ciudad, a esas horas del amanecer, comenzaba a despertarse muy lentamente. Un par de grupos mixtos de personas se dirigían a hacer sus tareas normales como cualquier otro día, algunas otras iban hacia el mercado a conseguir los mejores productos del día, otros simplemente hacían ejercicio, así que gracias a ello no les fue difícil encontrar el lugar donde se hospedaba Ryuusuke.
El pelirrojo se excusó y subió a su habitación a dejar a su hermana. Unos diez minutos después bajó con un mapa entre sus manos.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)