4/05/2018, 21:29
Volviendo hacia su tan ansiada villa, Eri se vio vagando por la Planicie del Silencio con algo de curiosidad haciéndole cosquillas en su mente. Según su mapa, cerca de aquel lugar se encontraban unas ruinas abandonadas, las cuales ella desconocía por completo aún habiendo salido tantas veces de su hogar y habiendo pasado cerca de allí. Por lo cual, bandolera atada a su hombro y ganas de explorar, modificó ligeramente su trayectoria con una nueva dirección.
Su hermana podría esperar.
Eri se encontraba andando a paso lento, mirando con curiosidad a las proximidades que se le presentaban ante sus ojos. Estaba maravillada a la par que un poco asustada tras estar allí sola, pero claro, no era una persona cualquiera, era una kunoichi cualificada y podía defenderse ella sola, así que podía ir tranquilamente a mirar un poco.
Se anudó fuertemente su bandana, solo por si acaso.
A lo lejos se encontraba un inmenso castillo hecho enteramente de piedra. Prendada de su majestuosidad, se encaminó rápidamente a él, hasta que una silueta apareció en la imagen, maldiciendo a la nada sobre la entrada.
Entendió que su nombre era Reiji.
Solo podía ver su espalda, bueno, la larga cabellera del chico y su espalda. Ya que entendía que por su voz, era varón.
—¿Necesitas ayuda? —preguntó, haciéndose presente en la estampa del chico con una mueca de duda y el dedo índice de su mano izquierda sujetando ligeramente su mentón.
Su hermana podría esperar.
...
Eri se encontraba andando a paso lento, mirando con curiosidad a las proximidades que se le presentaban ante sus ojos. Estaba maravillada a la par que un poco asustada tras estar allí sola, pero claro, no era una persona cualquiera, era una kunoichi cualificada y podía defenderse ella sola, así que podía ir tranquilamente a mirar un poco.
Se anudó fuertemente su bandana, solo por si acaso.
A lo lejos se encontraba un inmenso castillo hecho enteramente de piedra. Prendada de su majestuosidad, se encaminó rápidamente a él, hasta que una silueta apareció en la imagen, maldiciendo a la nada sobre la entrada.
Entendió que su nombre era Reiji.
Solo podía ver su espalda, bueno, la larga cabellera del chico y su espalda. Ya que entendía que por su voz, era varón.
—¿Necesitas ayuda? —preguntó, haciéndose presente en la estampa del chico con una mueca de duda y el dedo índice de su mano izquierda sujetando ligeramente su mentón.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)